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"Los tiros no me dan miedo, me da miedo perder las piernas"

"Lo más difícil de un conflicto armado es finalizarlo"

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El infierno de la guerra en una mirada

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MADRID.- “21 de mayo de 2010. Tengo más de cien años. He envejecido más y más en cinco años que en toda una vida”. Son palabras del fotoperiodista canadiense Louie Palu recogidas en un diario que escribió durante el tiempo que estuvo en la Guerra de Afganistán, entre 2006 y 2010. “¡Joder, he visto muchos disparates!”. El reportero, que no logró su objetivo de entender la guerra, sí ha querido compartir su firme convicción de lo absurdo de esa desenfrenada orgía de sangre y violencia y poner al espectador en la primera línea del conflicto con la película Diarios de Kandahar (El Documental del Mes).

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"Lo más difícil de un conflicto armado es finalizarlo"

Amnistía Internacional cifra el número de bajas de esta guerra en 150.000 civiles y militares en Pakistán y Afganistán entre 2001 a 2014. Calcula que hay más de 162.000 heridos y 1,2 millones de desplazados. Los talibanes e insurgentes capturados o muertos son más de 38.000. Víctimas de un primer movimiento del gobierno americano que solo un mes después de los atentados del 11-S, junto a las tropas británicas, decidió lanzarse a la invasión de aquel país. Sacaron a los talibanes del gobierno, pero los insurgentes se reagruparon y se hicieron fuertes de nuevo a partir de 2006.

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"Reconoce el peligro y trabaja"

“23 de septiembre de 2010, otro día en Kandahar. Ahora debo concentrarme, piensa en el encuadre. Mantén la calma bajo el fuego, concentra tu mente, reconoce el peligro y trabaja. Todo pasa tan rápido (...) No te dejes dominar por la situación”. Es el inicio de ‘Diarios de Kandahar’, un viaje por el infierno afgano, en el que el periodista va revelando gota a gota la atrocidad del conflicto, con imágenes dantescas de heridos, muertos, mutilados…

Un hombre llora

“Cuando llegas en avión es precioso, fascinante. Cuando aterrizas parece que estás en la luna. Hay cráteres, edificios bombardeados, ruinas… Se nota la tensión”. Y unas poderosas imágenes en blanco y negro van pasando ante los ojos del espectador, al que el periodista explica con un simple mapa dibujado con un lápiz el porqué de la obsesión por el dominio de Kandahar, no solo de las tropas en conflicto, sino también de países del otro lado de las fronteras de Afganistán. Y las consecuencias de ello.

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Diarios de Kandahar

La tragedia en blanco y negro

“Si tienes que alimentar a tu familia, puedes hacer cosas extremas. Al principio siempre creo que los civiles son de fiar, pero tienen mucho miedo o tienen familia entre los talibanes o… Están entre la espada y la pared”, dice a la cámara el sargento canadiense Matt Snoddon, que reconoce el sinsentido de esta guerra y lo difícil que es explicar la situación. “Aquí no hay líneas de batalla, no hay zonas amigas o enemigas. Nunca sabes si va a haber problemas o si no los va a haber. Es la parte más difícil de esta guerra. Estoy aquí desde hace un año y no he visto ningún talibán. Estamos codo con codo con el enemigo más de lo que creemos”.

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