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Los acusados salvan a Lotina

Lopo y Juan Rodríguez tumban al Villarreal (1-0)

MARIO LEIS

 

El Depor acometió el partido en puestos de descenso, con la coctelera de Lotina buscando medidas desesperadas. Después de tanto experimentar, la receta para cortar la sangría ya estaba escrita. La lógica habitualmente te lleva a encontrar solución a los problemas: le dio el partido a los veteranos; indultó a los acusados Lopo y Juan Rodríguez visto el partido que se marcó ayer es imposible dudar de su compromiso y ambos, por cierto, participaron en el gol del triunfo; puso dos delanteros después de muchos meses; y retornó a su sistema, el de los cuatro atrás. Adiós a la milagrosa línea de cinco con la que nunca comulgó. Además, músculo con tres medios centros, aliento e intensidad para desconectar el toque del Villarreal, también con un equipo extraño en el que Marchena jugó de 5 y con la ausencia de Rossi.

Y mientras al Depor le aguantó el fuelle la primera media hora logró acular al equipo de Garrido. Con mucho fútbol directo, centros al área y balón parado el partido se jugaba muy cerca del área de DiegoLópez, que a los 30 minutos impidió el gol local. Había arrancado Adrián dejando atrás dos líneas enemigas con su cambio de ritmo, pero cuando encaró al meta se le hizo de noche.

Pero en cuanto se aflojó la apretada mandíbula deportivista y bajaron el ritmo empezaron a asociarse Borja, Cazorla y Cani, y el Villarreal recuperó protagonismo, aunque sólo se enseñó con peligro en un cabezazo de Gonzalo antes del descanso, al que Aranzubía respondió acertadamente con la mano dura.

El partido entró en una fase durmiente sin intenciones ni hostilidades. El Villarreal lanzando señales de falta de ambición y desconectado. Pero el Deportivo, aunque sólo fuese por energía, tenía mejor pinta, como si estuviese más metido. Y fueron los apestados de Lotina los que despertaron el encuentro y sacaron al Depor del pozo. Un balón largo al área lo tocó Juan Rodríguez para ponérsela a Lopo, que la empujó a la jaula.

Garrido quiso espabilar desde el banquillo metiendo un socio para el desasistido Nilmar. Por entonces, el Deportivo ya jugaba a la contra. Se había juntado, cerrando líneas de pase y anulando a Borja. Lejos de reaccionar, el Villarreal quedó sometido a las salidas del equipo de Lotina, que pudo cerrar el partido con ocasiones de Riki y Juan Rodríguez. Aun así, el últimotramo se le hizo largo al equipo coruñés. Poco acostumbrado a jugar con viento a favor, no supo dormir con posesiones largas y tuvo que agruparse para abortar el débil arreón final del Villarreal.

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