Adriano, el primer fichaje de Rosell

Un día después de airear sus estrecheces económicas, el Barcelona abrió la caja de recaudos, tomó 10 millones de euros y contrató a Adriano Correia, el hasta ayer lateral del Sevilla. El brasileño, que hoy mismo llegará a Barcelona y será presentado el lunes, se convirtió así en el primer fichaje de la Junta presidida por Sandro Rosell. "Es muy posible que la próxima semana cerremos uno de los fichajes que quiere Pep", había dicho el mandatario azulgrana, apenas un par de horas antes de que el Sevilla, por boca de su presidente, confirmara el "principio de acuerdo".

Pendiente de la revisión médica para convertirse definitivamente en traspaso, el de Adriano supondrá el segundo fichaje del curso para el club azulgrana. El primero, el de Villa, fue el último legado de Joan Laporta como presidente de la entidad.

El Barça pagará al Sevilla 9,5 millones y cuatro más en variables

El traspaso de Adriano, que firmará por cuatro temporadas, supondrá 9,5 millones de euros para el Sevilla y otros cuatro más en concepto de variables si alcanza determinados objetivos. "Serán 13,5 millones porque los objetivos son bastantes simples", aseveró el presidente del Sevilla, José María del Nido, tras revelar que las negociaciones por Adriano se iniciaron el pasado sábado y quedaron prácticamente cerradas el jueves. "Con nosotros, Adriano había cumplido un ciclo, quería cambiar de aires y la del Barça era una gran oferta", añadió Del Nido.

Así, mientras el barcelonismo seguía pendiente del pretendido fichaje de Cesc, la Junta de Rosell perpetuaba lo que es ya casi una tradición estival: la incorporación de un jugador del Sevilla al Barça. Primero fue Keita. Luego Alves. Y ahora Adriano, al que sólo un informe médico desfavorable el jugador pasará hoy la preceptiva revisión médica podría impedir estar a las órdenes de Pep Guardiola este lunes, en el inicio de curso para los azulgrana.

Con la incorporación de Adriano, de 25 años, Guardiola refuerza la defensa del Barça, justa de efectivos tras la venta de Touré y Chygrynskiy y la posible marcha de Márquez, y con apenas recambios para Alves y Abidal, los laterales. Y lo hace con un jugador ambidiestro y polivalente, que actúa habitualmente de lateral, como su compatriota Alves, pero que también puede hacerlo de interior y por ambas bandas. Ocasionalmente, el brasileño puede incorporarse al medio campo, una de las características que exigía el técnico azulgrana tras el traspaso de Touré al Manchester City.

El brasileño ofrece un recambio de garantía para los laterales

"Uno de sus puntos fuertes es su capacidad de adaptación a diferentes posiciones de campo. Su habilidad y profundidad lo han hecho destacar en su juego como lateral en ambos lados. Su clara visión ofensiva y su trabajo le han permitido ocupar posiciones más avanzadas y moverse por el centro del campo con gran naturalidad", destaca la página web del Barça.

"Es un jugador que va muy bien con las dos piernas, que actúa en ataque y en defensa, juega en el lateral derecho y en el izquierdo, es muy polivalente y muy competitivo. Es un gran fichaje para el Barça", le elogió Xavi, ya en la manaña de ayer, desde su campus, donde aprovechó para saludar la llegada de Mourinho al Madrid como "una motivación más" para el Barça "porque es uno de los mejores técnicos de Europa" .

También Alves recibirá al segundo fichaje del Barça este curso con los brazos abiertos: comparten nacionalidad y un pasado común en el Sevilla. Juntos, durante cuatro temporadas, conquistaron una Copa del Rey, dos Copas de la UEFA, una Supercopa de España y una Supercopa de Europa. Ya sin Alves, Adriano alzó la Copa del Rey, en el Camp Nou, el curso pasado.

El lateral había debutado como sevillista precisamente ante el Barça, con un rotundo 0-4 para los azulgrana. A Sevilla había llegado en 2004 procedente del Coritiba brasileño, con un Mundial sub 20 bajo el brazo y una Copa América con la canarinha. Con el equipo hispalense, Adriano disputó 219 partidos y marcó 19 goles.

La contratación de Adriano deja a la caja del Barça con 40 millones de euros para el resto de incorporaciones. Javier Faus, vicepresidente económico, había cifrado esta semana en 50 millones el presupuesto para fichajes. Con ellos, los técnicos azulgrana pretenden incorporar un central o un pivote en la línea económica de Adriano, por si el Arsenal diera, finalmente, el brazo a torcer y Cesc, el sueño, pudiera vestir la zamarra del Barça.