Público
Público

El Almería se va mudo de Bilbao

ALBERTO CABELLO

 

Ni con once, ni con diez, ni con nueve. El Almería aplicó al pie de la letra el manual del visitante obediente en San Mamés. El Athletic resolvió el partido en diez minutos con un gol de buen delantero de Llorente. La tarde todavía tuvo algo de emoción porque San José falló un penalti unos minutos antes. Si no es por el acierto de Alves, el partido hubiera estado finiquitado en el primer hervor.

Con una presión muy fuerte y buen trato de balón, el equipo de Caparrós lanzó un bocado a la yugular desde el minuto uno. Los discípulos de Juanma Lillo no supieron hacer frente a la tempestad. El balón llegaba con facilidad a la zona de influencia de Llorente.

A pesar de esta enorme superioridad, el Almería se encontró con una bola extra cuando parecía que ya no quedaba partida. Koikili se marchó a la caseta expulsado antes del descanso. Quedaba todo un tiempo por delante para que los andaluces aprovecharan la circunstancia. Pero nada.

Todavía llegó una ayuda más con la roja a Castillo por un claro derribo a Goitom. Ya sólo quedaban nueve rojiblancos. Pero tampoco. Posesión, balones aéreos, prisas, aunque de ocasiones casi ninguna. Sólo un disparo de Goitom repelido por Gorka fue la cosecha. El visitante obediente recogió, saludó y se marchó sin ensuciar.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?