El Real Valladolid se hunde. Los pucelanos no han conseguido todavía ganar ante su afición y tienen muchas papeletas para ser uno de los tres equipos que desciendan esta temporada a segunda división.

Las carencias de los blanquivioletas quedaron patentes ayer en un partido donde se impuso el que menos defectos tuvo. El Athletic se paseó por Zorrila y gozó de numerosas ocasiones para conseguir una amplia goleada. A los seis segundos de partido el Athletic dispuso de una clarísima ocasión para abrir el marcador en un buen centro de Gabilondo que Aduriz remató al travesaño. A los siete minutos el Valladolid intentó sorprender al Athletic con un potente disparo de Capdevila que Iraizoz despejó a córner; fue un espejismo, ya que sólo un minuto después Aduriz se aprovechó de un error defensivo de Marcos para batir por bajo y casi sin ángulo a Butelle.

El Valladolid se vino abajo y el Athletic comenzó a mostrarse muy superior en todas las líneas. El equipo pucelano fue un manojo de nervios y pudo encajar varios goles más por las indecisiones de Butelle, muy fallón en toda la tarde. A los 31 minutos David López botó una falta desde la frontal y Aduriz cabeceó la pelota al fondo de las mallas.

El partido pudo cambiar tres minutos después cuando Pérez Burrull anuló por falta un golazo de Ogbeche. Con 0-2 se llegó al descanso y Caparrós planteó la segunda parte con su peculiar estilo amarrategui. El Athletic se replegó y dejó que el Valladolid le encerrara en su área. Mediada la segunda parte Ogbeche penetró en el área y fue derribado por Koikili. Pérez Burrull decretó la pena máxima que fue transformada por Víctor para poner el definitivo 1-2.