El Barcelona pasó ayer por Palafrugell (Girona) como la tramontana 'un viento extremadamente seco, muy fino, de gran impetuosidad, de soplo continuo y de buena respiración', según la pluma de Josep Pla, el más universal de los palafrugenses y además de provocar la locura entre la hinchada local, la visita del conjunto azulgrana al Baix Empordà reportó a las arcas del club anfitrión 40.000 euros.

Eliminado de la Copa y liberado de partidos entre semana hasta finales de febrero, hace sólo una semana el Barça aceptó participar desinteresadamente en los actos de celebración del centenario del Club de Futbol Palafrugell, cuyo primer equipo milita en la Regional Preferente, con un entrenamiento matinal en su estadio, a más de 120 kilómetros de la ciudad deportiva de Sant Joan Despí. En Girona, les esperaban ayer a mediodía cerca de 5.500 aficionados.

'No nos han superado los acontecimientos, pero la respuesta de la gente sí ha sobrepasado nuestros cálculos. Contábamos con vender unas 3.000 entradas y hemos alcanzado las 5.500', celebraba el presidente del club anfitrión, Lluís Carreras, para añadir: 'Sólo en taquillas, hemos hecho unos 40.000 euros, más de la mitad del presupuesto del club [75.000] a los que habrá que añadir la caja del bar. Pero si el Barça, que no se lleva ni un duro, no nos hubiese permitido cobrar entrada, también habríamos festejado su visita como colofón al centenario; sin duda'. Ver el entrenamiento del Barcelona ayer en Palafrugell costaba entre 3 y 15 euros.

'Con la recaudación de hoy [por ayer] cubrimos lo que queda de temporada y la que viene', abundó Carreras. 'Con su generosidad, el Barça termina con esa imagen que se labró antaño, cuando no hacía estas cosas', terció Rodolf Saval, directivo del club.

Cerca de 5.500 aficionados pasan por taquilla para ver al hexacampeón

Tal era la expectación en Palafrugell por la visita del hexacampeón que el presidente solicitó a la Concejalía de Educación que mediara con las escuelas para que los niños pudieran ver al Barça sin saltarse ninguna clase. Y es que no había recodo en el estadio municipal del que ayer no saliera un chiquillo.

Las aulas del CEIP Carrilet no acusaron las bajas. 'Somos una escuela de primaria y los niños todavía son muy pequeños; la visita del Barça no ha provocado ninguna incidencia en la escuela', convino una de las responsables del centro. 'Sólo nos perdemos la clase de medio natural', admitían varios alumnos de sexto del CEIP Torres Jonama mientras entonaba el cumpleaños feliz que la hinchada dedicó al inicio de la sesión a Gerard Piqué. El zaguero sopló ayer 23 velas.

Sobre el césped, tras las fotos con el equipo local y unos rondos, los azulgrana se enfrascaron en un partidillo entre ellos. Alves, Puyol y Abidal trabajaron a parte, mientras que Henry, con una gastritisvírica, fue el único ausente en Palafrugell.

Guardiola quiso sacarle el máximo jugo a la excursión y tras el entrenamiento se llevó a sus pupilos a degustar unoslomitos de rape a la parrilla al restaurante Les Panolles, de Santa Cristina dAro, para el disgusto de la gente de Llafranc que esperaba al equipo en una casa de comidas muy popular de la zona. Tras unos problemas con el autobús (tuvieron que buscar un auto de repuesto para hacer el trayecto de Palafrugell al restaurante), el equipo regresó a Barcelona.

El club de Regional Preferente cubre más del 50% del presupuesto anual

La próxima semana, más. El día 9, el Barça se entrenará en Reus, donde ya se frotan las manos pensando en los euros que les reportará la visita del hexacampeón. Allí, la entradas alcanzarán los 20 euros.

'En nuestro caso, la presencia de Domènec Torrent en el staff técnico de Guardiola ha sido determinante para que vinieran', reconocía Sepu,técnico del Palafrugell. Y es que Torrent entrenó al conjunto blanc-i-negre entre 1998 y 2003. Como Tito Vilanova, que también dirigió en su día al equipo ampurdanés. Este fin de semana, los de Sepu reciben al Canovelles; en las gradas del estadio municipal estarán los 100 aficionados de siempre.