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Dr. Jekill, Mr. Madrid

La transformación del equipo de Plaza, a prueba ante el Efes Pilsen

MIGUEL ALBA

En el Madrid de Charles Smith, el que consiguió el doblete (Liga y Copa ULEB) en 2007, ganar o perder no era una cuestión de actitud. El propio Plaza lo admite. 'El secreto de los años anteriores es que la gente tenía química, disfrutaba y se divertía'.

A día de hoy, el grupo de amigos con los que hoy se reencontrará La Araña en Estambul está atrapado en ese debate. Porque este Madrid es como esa persona ciclotípica en el que sus continuos cambios de humor impiden conocerle realmente. Cuando aparece la actitud, el grupo de Joan Plaza se sube al pico del diente de sierra que dibuja este año su rendimiento. 'Si mis jugadores se divierten eso es lo que les hace conseguir grandes resultados', apunta el técnico.

Entonces, todo se relativiza. Incluso el rival. La sonrisa hace funcionar los sistemas y los balances pierden los números rojos de partidos como el del Pamesa. La reivindicación se completó ante el Gran Canaria, el pasado domingo.

El triunfo por quince puntos ante el ex-colíder de la ACB, los siete mates, la nueva conexión Mumbrú-Massey o, simplemente, que el Madrid ha decidido hacer borrón y cuenta nueva deben confirmarse hoy ante el Efes Pilsen en Euroliga. Si no, el viaje hasta Turquía se convertirá en un retorno a los vicios que persiguen al Real Madrid desde el inicio de la temporada.

Enfrente, Charles La Araña Smith encabeza un equipo que presenta a siete jugadores que han disputado la ACB. Con la baja de Mario Kasun, el grupo de Ergin Ataman busca ante el Madrid superar su bache europeo -dos derrotas consecutivas- como ha logrado en la competición doméstica, donde su racha de tres victorias consecutivas le han colocado segundo, por detrás del invicto Telekom.

'Será el partido más difícil del grupo hasta el momento porque el Madrid tiene muchos jugadores de talento que nos van a dificultar al máximo', asegura Milos Vujanic, una de las referencias del Efes junto al griego Kakiouzis, los pívots Gonlum y Peker, y su pareja de americanos Thornton y Shumpert.

'La última victoria ante el Panionios les obliga a no poder cometer más errores en su pista. Además, las victorias en casa son las que te dan opción de tener mejores registros al final de la temporada', explica Plaza, quien necesita urgentemente que finalice el proceso de acoplamiento de los nuevos para dejar de hablar de actitud y cambiar el objetivo de su discurso: la fortaleza.

Uno de los nuevos fichajes, Quinton Hosley regresa a Turquía por primera vez desde la pasada temporada, cuando su aportación en el Pinar Karsiyaka le convirtió en el mejor reboteador y en el segundo máximo anotador del campeonato turco. Sin embargo, tanto Hosley como Massey no acaban de mejorar los números de Reyes y Llull, el trabajo de Mumbrú o la solvencia de Bullock y Hervelle.

Eso sí, el mensaje positivo para Plaza es que sus apuestas foráneas no se han contagiado de la baja forma de Papadopoulos, el jugador que llegó al Madrid para devolver al equipo blanco su solvencia en la Euroliga y que, un año después, se conforma con ver partidos desde el banquillo sin jugar un solo minuto. Lazaros es el mejor ejemplo de la actitud que necesita el Madrid.

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