L'Hospi', un rival muy azulgrana

Sin sus jugadores suramericanos (Messi, Mascherano, Alves y Adriano), sin Thiago ni Cuenca, ya convocados con la selección sub-21, pero antes de que se les escapen los ocho nacionales llamados por Vicente del Bosque, el Barcelona le hace un quiebro al calendario para disputar, esta noche (22.00 horas), la ida de los deciseisavos de final de la Copa del Rey ante L'Hospitalet, de Segunda B. El Mundial de Clubes de Japón, que disputarán a mediados de diciembre, y los compromisos de la selección obligan a los azulgrana a estas estrecheces. Aunque no siempre fue así.

En las mismas circunstancias, en 2000, el Madrid fue eximido de esta ronda de la Copa por la Federación. "Mejor no respondo", dijo ayer Guardiola cuando se le preguntó si se sentía víctima de un agravio comparativo. "Tenemos a 13 del primer equipo y a cinco fantásticos jugadores del filial [Deulofeu, Rafinha, Dos Santos, Tello y Sergi Roberto], que nos ayudarán y cuyo nivel podremos calibrar por si los necesitamos más adelante", resolvió el técnico azulgrana. "En definitiva, jugará el Barça y estos futbolistas darán otra lección de lo que son: les da igual jugar aquí, allá o donde sea", añadió, sin escudarse en la hierba artificial de La Feixa Llarga: "Es un campo grande y estará muy bien".

"Tenemos a 13 del primer equipo y a cinco fantásticos jugadores del filial"

Guardiola conoce bien a L'Hospi. Es vecino y su entrenador, Jordi Vinyals, pasó por Can Barça, al igual que algunos de sus jugadores. Comadevall, por ejemplo, debutó con la zamarra azulgrana en el curso 2005-06, con Frank Rijkaard. "L'Hospi me gusta mucho: los equipos de Jordi siempre han jugado bien. Son buenos en las jugadas de estrategia, Cirio y Haro van muy bien al espacio, Prats es un goleador, Pitu tiene una izquierda muy buena y Viali, mucha experiencia como central", analizó Guardiola, en una radiografía que impresionó hasta a los periodistas que cubren la información de L'Hospi.

Jordi Vinyals y sus muchachos no ven la hora de que llegue el partido. En su liga, son segundos tras enlazar seis victorias consecutivas. Pero la ilusión por jugar ante "el mejor equipo del mundo" supera cualquier otra circunstancia. "Nuestras opciones son mínimas; me conformo con que todos, yo el primero, aprendamos todo lo posible", señaló Vinyals. "Será un buen recuerdo para cuando nos retiremos", apuntó Rubén García. Él, como sus compañeros, lucirá un bigote negro, símbolo empleado por Movember parar promover la lucha contra el cáncer de próstata.