Luis quiso poner puertas al monte

Luis debe tener las gafas caídas, señal de disgusto. Planeó un entrenamiento a puerta cerrada. Lejos de la cámaras, del chiste fácil del aficionado, de los corrillos de los periodistas, de los micrófonos delatores. Los empleados de la Federación hasta dispusieron de una lona supletoria para hacer más pared y que nadie se entrometiera en la pizarra que tan plácidamente había en el hotel.

La primera intención puede ser loable, pero el paraje en el que España se ejercita hace que sea imposible tener intimidad en Neustift. El campo, a la altura de un riachuelo y las verdes montañas del Valle del Stubai por todos los lados. Evidentemente, alrededor de 50 personas esperaban la salida de Luis y sus hombres.

Luis miró y advirtió a la seguridad. La UEFA intentó tomar cartas en el asunto y varios policías se acercaron a los periodistas y aficionados que andaban por allí para desalojarles de la montaña. Nada pudieron hacer. Los lugares públicos, del pueblo son. Y Luis tuvo que soportar que su pizarra fuera vista prácticamente por todo el mundo que pasaba por allí.

El seleccionador dedicó la mayor parte de la sesión preparatoria, que duró una hora y diez minutos, a los lanzamientos de esquina. No es el fuerte de España y Luis tuvo a sus jugadores preparando una y otra jugada. Hasta cuatro tipos de córners tiene la roja en cartera. El primero, para Ramos, al primer palo; el segundo buscaba siempre al incisivo Capdevila, toda una fiera de las jugadas a balón parado; el tercero, los hombres altos (Ramos-Capdevila) bloquean para que un tercer hombre entre desde atrás. La sorpresa quedaba para el cuarto saque de esquina. Emulando aquel gol de Mendieta en el Camp Nou, Xavi saca a la frontal y Senna la empala. Cierto es que no acertó ninguno, pero si va entre los tres palos la potencia del brasileño hace ese disparo imparable.

Los suplentes se llevaron la desilusión de trabajar aparte y de actuar de sparrings de los titulares en algunas jugadas. Cesc, Xabi Alonso y De la Red (que podría ser una de las novedades, si se produjera un cambio de última hora) tendrán que seguir esperando oportunidades en el segundo tiempo o en los siguientes partidos contra Suecia o Grecia.