José Mourinho no se corta en ninguna plaza. Le da igual un torneo doméstico que la competición más grande. Si se considera perjudicado, carga igual contra los árbitros españoles que contra los europeos. Ayer no iba a ser menos. La mano de Gourcuff dentro del área al repeler una falta sacada por Cristiano le encrespó sobre el césped y le soltó la lengua tras el partido. Se confesó 'enfadadísimo' con el alemán Stark y se explayó al respecto.

'Las decisiones arbitrales son complicadas -se arrancó en Gol T-, pero hay situaciones muy claras que no dejan dudas a nadie. A cinco metros del árbitro y del auxiliar, cuatro ojos mirando lo mismo y no ven lo que todos. Estoy enfadadísimo porque una cosa es ponerte 0-2 y otra 0-1. Es inaceptable, lo han visto y no lo han pitado'.

Por lo demás, tan antagónicos y tan iguales, sólo el entrenador portugués y Jorge Valdano se mostraron capaces de controlar una cita de alta tensión. 'Hemos marcado por fin en este estadio -recordó sonriente el director general-. No le perdimos la cara al partido y estamos en una posición muy favorable para pasar, pues el equipo inspira confianza, sobre todo en el Bernabéu'.

El peso del historial de fracasos del Madrid en Lyon hasta ayer, tres derrotas en otras tantas visitas a Gerland es tal que Sergio Ramos, a pie de campo y aún con las pulsaciones desbocadas, escenificó una derrota. No pareció recordar el valor doble de los goles fuera de casa y, en tono bajo, se aturulló ante el micrófono de TVE: 'Es una pena que se nos hayan escapado los tres puntos. Me voy a casa con una sensación agridulce y la cabeza baja. Hemos tenido dos buenas ocasiones, una mía al palo. No ha podido ser y ahora en la vuelta hay que hacer un partido serio, ser siempre optimista y soñar con pasar eliminatoria'.

Mourinho explicó la titularidad de Adebayor y la entrada de Benzema en el segundo tiempo: 'Sabía que iba a ser un partido muy duro, de mucho choque y balón largo, así que cuando se abrió un poco y bajó la intensidad defensiva era el momento de que entrara Karim. Me alegro de que haya marcado en la vuelta a su casa'.

El propio francés lo confirmó: 'Es un gol muy importante para el equipo y para mí. Había familiares en el campo que se han alegrado mucho'. Adebayor fue más pragmático: 'Si antes del partido nos aseguran un 1-1, lo hubiéramos firmado'.

También coincidieron Mourinho y Valdano en la importancia de la mística del Bernabéu. 'Espero que en el partido de vuelta un campo como el nuestro pueda ofrecernos una gran noche europea, propia de un estadio mítico', concluyó el técnico. Bastos, por cierto, no podrá jugar tras ver una amarilla.