La plantilla del mítico Atlético de Madrid de balonmano de 1985 se reúne cada Navidad. Acuden muchos jugadores y su entrenador, Juan de Dios Román, hoy presidente de la Federación. Este año, el de la resurrección del Atlético, había mucho que celebrar. O eso parecía. Al llegar se abrazaron, brindaron, y se desearon felicidad. Luego, durante la cena, poca paz. Ataques en primera y segunda oleada, al más puro estilo de la vieja escuela balonmanista: de frente y sin guardarse nada. No acaban de ver claro el proyecto del nuevo Atlético.

MILIÁN: Yo hablé una vez con el director general del club, Luis Miguel López, y me dijo que pensaba contar con los veteranos, pero desde entonces, nada.

JUAN DE DIOS: Eso no es verdad. El club llamó a Claudio para organizar una reunión.

CLAUDIO: Sí, y me reuní con él para ver qué podíamos hacer, pero no hemos hecho nada.

MILIÁN: Es la primera noticia que tengo.

NOVALES: Yo lo primero que pediría es que, al menos, cuando vamos a los partidos estemos todos juntos. Ir a un pabellón para 13.000 personas y que cada uno esté en un lugar, pues no me parece bien.

CECILIO: No se puede hacer nada. Los abonos están vendidos en las zonas donde nos querían colocar.

"Habría que juntar a los jugadores antiguos con los nuevos", dice Parrilla

MILIÁN: Vamos, que se acaba la temporada y seguimos como estamos. En la Supercopa, lo práctico hubiera sido ir a recolectar al mayor número de jugadores exatléticos para que efectuaran el relevo.

CECILIO: ¡Pero si dos días antes de la Supercopa no se sabía ni dónde se iba a jugar! Llegará un día en el que se hará algo. Todo tiene su proceso. A mí me hubiera gustado ver a todos desde el primer día, ahí, apoyando. Yo hice una propuesta a Luismi, como hace por ejemplo el Madrid de baloncesto. Nos joderá, pero hacen cosas muy buenas. Para los veteranos tienen palcos especiales para que vayan con los amigos que tienen empresas, catering y mil historias.

CHECHU: La clave está ahí. Tenemos que preguntarnos si este equipo es el Atleti.

DE DIOS: No olvidemos que el Atlético de Madrid no es sino un patrocinador del Club Balonmano Neptuno. Pa-tro-ci-na-dor, o sea que este año no es el club.

PACO PARRILLA: En el homenaje que organizaron para Cecilio, Milián nos llamó a todos y fuimos. Y pagamos, por lo menos yo. Lo que nos fastidió a los que pagamos es que se habían regalado un montón de entradas y nadie había contactado con nosotros. Lo positivo es la vuelta del balonmano a Madrid, donde por fin hay una ilusión que no existía.

DE DIOS: Yo pido que en esta mesa no se sea muy crítico. Recu-perar esa historia está muy complicado porque no hay estructura. Lo cual no quiere decir que justo para el primer día, aquel equipo sí debió de estar al lado de Cecilio.

"Acabará siendo el Atlético de verdad", augura Luis Miguel López

MILIÁN: Y a partir de ahora, ¿qué? Pues que si el camino no es el que interesa, adiós muy buenas.

CLAUDIO: Yo creo que el club debería implicarse más.

COBO: Los tiempos han cambiado, pero no creo que en nuestra época la infraestructura de la sección fuera mucho mayor.

DE DIOS: Sí, pero era el club. La estructura era Alejandro Ortega, Jefrrey y yo. El equipo era del club, y llegaba yo ahí y pegaba dos gritos.

JUANÓN: ¿Tú crees que Díaz de Mera (propietario del antiguo Ciudal Real) está en disposición de ceder todos los derechos al Atlético?

DE DIOS: Eso pregúntaselo a él. Es un problema de tres millones de euros y de compromiso con los jugadores y de intentar que no se queden tirados. No te olvides, y en eso es una buena acción del presidente. La pena es que el Atlético no tuviera un pabellón, ese es el problema. Esta sería la gran solución. Y eso que se nota el esfuerzo que se está haciendo con lo de Vistalegre.

NOVALES: Pues en La Peineta no se ve ningún pabellón.

DE DIOS: En teoría, va en Alcorcón.

MILIÁN: Ese fue el principio del fin del Atlético.

CHECHU: Se juntaron el hambre con las ganas de comer: Atlético y Ciudad Real, ¿qué va a salir de ahí?

CLAUDIO: No seas pesimista.

RICO: Lo bueno es volver a ver a gente que hacía 20 años que no veías.

PARRILLA: Los que hemos ido al pabellón nos hemos encontrado con gente como Javier López Mingo, que fue utillero. Mucha gente del balonmano que estaba perdida. En eso sí hemos ganado. Habría que hacer un acto para unificar a los antiguos jugadores con los nuevos.

RICO: Bonito, pero difícil. Era más fácil homenajear a uno (Cecilio) y llamar a todos y no se hizo.

CECILIO: Si hay algún problema con mi camiseta, la bajo, ¿eh? Ja, ja, ja...

Conocidas estas críticas, Público quiso recabar la opinión de Luis Miguel López. Es la siguiente: "Cuando haya una auténtica asociación de veteranos, hablaremos. Ahora mismo hay mucho lío. Vivimos en Ciudad Real, hay problemas de calendario y apenas voy a Madrid. Estos días he ido a Leganés, Plaza de Castilla... para buscar un pabellón en el que puedan entrenar el año que viene y para que los chicos busquen casa cerca. Vamos a estar en Madrid por mucho tiempo, será de verdad el Atlético y los veteranos quienes nos den fuerza. Si están tan interesados, también podían haber dado un paso al frente, ¿no?".