Este artículo se publicó hace 16 años.
La reválida atlética
Hace 3.409 días que los rojiblancos no superan al Real Madrid en el Calderón. La baja de Diarra resquebraja al Madrid que teme perder la batalla del medio
La filosofía de un atlético tiene como principio fundamental derrotar al Real Madrid sobre todas las cosas. No existe un nirvana absoluto si los blancos viven en la gloria perpetua. Da igual cómo se encuentre el Atlético, si ha encajado seis goles en el Camp Nou, si Agüero llega extenuado de Argentina, si la UEFA les atropella y se da a la fuga, si Coupet se empeña cada jornada en superar la cantada del día anterior... El rojiblanco sólo piensa en el día que pueda celebrar una victoria ante su querido enemigo en el día del derbi.
Han pasado 3.409 días desde que el Calderón pudiera presumir de ver al Real Madrid derrotado. Muchos días, cientos de proyectos, innumebrables decepciones. En el Atlético saben que su remontada tras el hacia la nobleza de la Liga tiene que ser culminada con una victoria en el derbi.
Optimismo en el ManzanaresMotivos futbolísticos para afrontar el derbi de forma optimista no les faltan este año. Kun es el futbolista más decisivo de la Liga y recupera a Forlán como atacante; Maniche y Simao vuelven al engranaje del centro del campo para rehabilitar lo hecho por Assunçao y Luis García las últimas semanas y, la defensa, aparcando el desastre del Camp Nou, tiene aval de solvencia suficiente y no se vislumbra.
Desde Valdebebas ya se desliza que este Atlético es el más fuerte que se han encontrado en años. "Este año están bien y no son sólo el Kun. No hay que basar un equipo en un jugador, aunque sea un gran delantero. No hay que quitar mérito a la defensa, centro del campo o Forlán, que para mi es un pelotero extraordinario. Es un buen bloque", afirmaba ayer a Efe Sergio Ramos.
Y es que el Madrid aparece en el derbi con inestabilidad en el medio. La fractura física del equipo en esta demarcación es acusada. El último en caer ha sido Diarra. La baja del malí es una cuestión de estado para Schuster. Diarra es el encargado de mantener el equilibrio blanco. Gago, que no juega desde agosto un partido completo, hará de pivote defensivo sin estar al cien por cien y Robben, el único jugador capaz de desequilibrar en banda sólo está para jugar quince minutos. Schuster teme que Maniche crezca enteros por esta debilidad.
Claro que la principal arma de los madridistas para estos derbis lleva el 7. Raúl aparece de nuevo por el Manzanares en un momento dulce. Cuatro goles en el último mes y la máquina de Di Salvo para que Raúl perviva en la eterna juventud le sitúan como el referente. Aunque Van Nistelrooy lleva descansando diez días. Peligro.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.