Rubén Castro, el goleador al que Lotina vetó

Durante varias pretemporadas, Rubén Castro (Las Palmas, 1981) ha estado atornillado a la misma lista: la de cedibles. Sin oportunidades en el Depor. Los equipos de Segunda división aguardaban a la lista de descartes del equipo gallego para intentar pescar al goleador. "He dado mil vueltas por toda España", cuenta para resumir su trayectoria.

Hasta cinco equipos, Albacete, Racing, Nàstic, Huesca y Rayo Vallecano, se hicieron con el préstamo de este delantero errante hasta que el Betis apostó por su fichaje el pasado verano. "Cuando estaba en A Coruña, me entrenaba pero no me dejaban jugar partidos y está claro que en el fútbol es muy diferente jugar partidos que entrenarse a diario. Lo único que me faltaba era eso, coger ritmo minutos de fútbol y creo que el míster me ha dado esos minutos que me dan esa chispa", reconoce.

Y es que viene casi como recomendado, puesto que Pepe Mel ya lo tuvo a sus órdenes la temporada pasada. "Es un técnico que le gusta que sus equipos jueguen bien al fútbol, que vayan a por los partidos, que lleguen muchos delanteros al área rival. Le gusta el fútbol y en Segunda hay muy pocos equipos que hagan esta apuesta", asegura.

El club verdiblanco desembolsó 1,7 millones de euros para desligarlo del año de contrato que le restaba en A Coruña. El dinero ha sido bien invertido. Castro ya suma 18 goles (13 en Liga y cinco en Copa) en esta primera mitad del curso. Cada vez que marca dibuja con la mano una cresta en el pelo en recuerdo de un viejo amigo que luce tal peinado. Sus goles han sido fundamentales para encumbrar al Betis al cómodo liderato de la Liga Adelante.

Rubén ha estado a punto en dos ocasiones de superar un récord histórico en el Betis: ser el jugador que marca en más jornadas consecutivas. En dos oportunidades ha completado el ciclo de cinco semanas consecutivas con gol, a una de las que completó el argentino Aquino en la 93-94, la temporada de otro ascenso.

Llama la atención que un jugador de su perfil no tuviera oportunidad alguna en un Deportivo que lidia con un problema evidente de falta de gol. "Yo estaba apartado del equipo, ni siquiera me dejaban jugar los partidos amistosos. Sabía que podía tener un sitio en el Deportivo, pero Lotina prefirió a otros". Esta noche espera continuar la racha en el Camp Nou y volver a peinar con una cresta su hazaña.