El español Dani Sordo (Citroen) ha finalizado la segunda etapa del rally de Japón segundo sólo superado por el finlandés Mikko Hirvonen (Ford), en una etapa en la que el francés Sebastien Loeb (Citroen) abandonó y el finlandés Marcus Gronholm (Ford) no se pudo reenganchar tras el abandono de ayer.

El joven piloto español se encuentra a 38.2, por lo que tendrá difícil luchar por la victoria en la última etapa, aunque ante la cantidad de abandonos que se están sucediendo en la prueba nipona, nada sería descartable. Por detrás tiene al noruego Henning Solberg (Ford) tercero, algo lejos en tiempo pero que tampoco permite ningún tipo de confianza.

Si bien Gronholm abandonaba ayer fruto de un accidente que dañaba seriamente su coche, daños que no le han permitido reintegrarse a la carrera, hoy la sorpresa la daba Loeb, que en la decimotercera especial tomaba mal una curva debido a un fallo en las notas que le dejaba fuera de la competición y devolvía la emoción al campeonato.

Mal rally para Subaru 

El español Xevi Pons (Subaru) tampoco tuvo suerte hoy y tuvo que abandonar tras dos salidas de pista en la segunda especial de hoy. Mal rally este para el equipo Subaru, que corre en casa y que no podrá clasificar a ninguno de sus pilotos entre los primeros. Sólo el noruego Petter Solberg, que ayer abandonó y hoy se reenganchó según la normativa 'ReStart', con veinticinco minutos depenalización ante los cuatro tramos que no pudo disputar ayer.

Sordo tuvo un gran día, no sólo porque se encuentra segundo en una prueba de grava, que no es su especialidad tan exigente como es Japón, sino porque se ha librado del abandono, algo de lo que pocos pueden presumir, y porque ha marcado el mejor tiempo en la decimoséptima especial, una de las más difíciles de la jornada.

Se encuentra lejos de Hirvonen, pero seguro que mañana, en la última jornada, saldrá a presionarlo buscando el error de éste. Sordo es el único piloto no Ford de entre los cinco primeros. Loeb tuvo hoy un fallo en las notas y lo pagó caro, se salió de la pista y dañó el coche. No pudo continuar y devuelve la emoción a un mundial al que parecía se encaramaría líder al término de la prueba y sentenciaría sobre el asfalto irlandés.