Público
Público

"En el vestuario, Materazzi quería matar a Balotelli"

Ibrahimovic revela la confesión de su ex compañero

RICARD MILLÁN

'Todavía es un niño', declaraba Stankovic sobre la actitud de Balotelli tras el Inter - Barça del martes. El serbio, encargado de recoger la camiseta que había tirado al suelo Super Mario, con desprecio, tan pronto finalizó el partido, trataba así de justificar a su compañero.

Una noche de gala en San Siro, las gradas repletas de tifosi y la victoria sobre el vigente campeón eran, a priori, motivos más que suficientes para que la velada se convirtiera en una fiesta para los lombardos. Pero, como sucede incluso en las mejores familias, siempre hay una oveja negra que ensombrece las celebraciones.

'Los demás lo han dado todo mientras su actitud ha sido lamentable', afirmaba Mourinho. El capitán, Zanetti, calificaba la actitud del delantero de origen ghanés como una 'melodía desentonada'. Materazzi, en cambio, quería matarlo, según le confesó a su ex compañero Ibrahimovic.

En los despachos, la directiva interista ya ha tomado cartas en el asunto y le ha abierto un expediente disciplinario. 'Será sancionado', proclamó, tajantemente, el presidente Moratti.

Lippi, seleccionador italiano, también ofreció su punto de vista, y destacó la inmadurez del chico, además de cerrarle las puertas de la selección de cara al Mundial.

Temperamental, de sangre caliente y, a menudo, atacado con insultos racistas por las aficiones incluso por la suya propia, después de ponerse la zamarra del Milan en televisión, canturrear el himno rossonero en los vestuarios del Inter o desafiar al mismísimo Mourinho, a Super Mario, prácticamente, no le quedan reglas por incumplir.

'Si quiere el perdón de la afición debe disculparse inmediatamente, correr como un loco y marcar dos goles al Atalanta', dijo el Ministro de Defensa de Italia, interista, Ignazio La Russa.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?