El ciclista español del Caisse D'Epargne Luis León Sánchez se adjudicó por delante de Maxime Monfort y Carlos Barredo la séptima y última etapa de la París Niza, de 115 kilómetros y con tres puertos de primera categoría, mientras que el corredor italiano Davide Rebellin logró la victoria final con una ventaja de sólo tres segundos sobre Rinaldo Nocentini.

La última etapa se presentaba muy disputaba ya que se llegaba a Niza sin conocer el ganador final. El italiano del Gerolsteiner Davide Rebellin portaba el maillot amarillo con tan sólo tres segundos de ventaja sobre su compatriota Rinaldo Nocentini y podían jugarse la victoria final en las bonificaciones de los sprints.

El recorrido de la séptima etapa, inicialmente de 121 kilómetros, se redujo hasta los 115 kilómetros finales debido a los desprendimintos sobre la calzada producidos entre el kilómetros 88 y el kilómetro 97 del trazado inicial. Así, con este nuevo itinerario se suprimió una subida entre los puertos de Turbie y Eze.

Los corredores salieron con ganas en una día soleado y tras varios intentos de fuga, un grupo de 34 corredores iniciaron en cabeza el primer puerto, el col de Porte, de 7.2 kilómetros y con un desnivel medio del 7.2 por ciento, al que sólo llegaron 11 ciclistas destacados a la cima.

 
La figura de Luis León Sánchez apareció en el descenso del Col de Eze y, como ayer junto a Chavanel en el descenso del Tanneron, se jugó el todo por el todo en las curvas del último puerto y llevó al grupo formado en el descenso en el que estaban Antón y Cunego hasta la rueda de los dos escapados. Una vez que los dos fugados fueron neutralizados, el grupo se paró ya que nadie asumía la responsabilidad de llevar el peso de la escapada, lo que permitió al pelotón acercarse hasta tener una desventaja de ocho segundos.

A falta de 4 kilómetros, el pelotón venía lanzado y parecía que Rebellin y Nocentini se jugarían la victoria final en las bonificaciones del sprint, pero Luis León vio la oportunidad y con un potentísimo ataque lanzó la bicicleta trazando limpiamente las curvas para abrir hueco en cada viraje antes de afrontar los dos últimos kilómetros en línea recta en el paseo marítimo en el que finalizaba la etapa.

El murciano llegó a la larga recta mermado por el viento en contra y con una ventaja mínima perseguido por su ex compañero en Liberty Carlos Barredo y Maxime Monfort, pero manteniendo la fe en sus fuerzas logró un magnífico triunfo que sumar al que consiguió el pasado año en esta misma carrera en la etapa que finalizó en Cannes.

El pelotón entró en meta a cinco segundos del español comandado por Cristophe Moreau en un sprint en el que no se metieron ni Rebellin ni Nocentini, por lo que los tres primeros puestos de la clasificación general quedaron como estaban antes de la disputa de la etapa, con Davide Rebellin como ganador de la carrera acompañado por Nocentini, segundo y Yaroslav Popovich, tercero.