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El Banco de España pone en marcha un sistema de cita previa para evitar las colas en la calle de compradores de Letras

En las última cinco semanas, los pequeños ahorradores han comprado 1.100 millones en Letras del Tesoro, prácticamente tres veces más que en todo 2022, ante el aumento de su rentabilidad mientras la banca sigue sin subir los intereses de los depósitos.

Decenas de personas hacen cola para contratar Letras del Tesoro, en el Banco de España. E.P./Carlos Luján
Decenas de personas hacen cola para contratar Letras del Tesoro, en el Banco de España. Carlos Luján / EUROPA PRESS

Reuters

El Banco de España puso en marcha el martes un sistema de citas para gestionar mejor la demanda por la deuda pública a corto plazo de los ahorradores de a pie, deseosos de beneficiarse del repunte de los rendimientos provocado por la subida de tipos, lo que provocó largas colas en la calle.

La demanda entre los pequeños inversores, que en noviembre sólo poseían el 0,2% del total de la deuda pública española, según el Tesoro, ha aumentado en las últimas semanas, ya que los bancos españoles están tardando en subir los tipos de interés que ofrecen en los depósitos en consonancia con los costes que cobran en los créditos.

En 2022, España colocó unos 400 millones de euros de deuda pública a través de la web del Tesoro, el 97% de ellos en deuda a corto plazo a inversores minoristas, según sus datos. En las últimas cinco semanas, la demanda de ahorradores minoristas había aumentado hasta los 1.100 millones de euros, con 700 millones de euros sólo en las dos últimas semanas, según el Tesoro.

El martes, el Tesoro español vendió 5.060 millones de euros (5.400 millones de dólares) en letras a seis y doce meses, con un tipo medio del 2,675% y el 2,813%, respectivamente, frente al 2,584% y el 2,983% anteriores.

Decenas de personas hacen cola para contratar Letras del Tesoro, en el Banco de España. E.P./Carlos Luján
Decenas de personas hacen cola para contratar Letras del Tesoro, en el Banco de España. Carlos Luján / EUROPA PRESS

Bancos españoles como Santander, BBVA y Caixabank aún no han subido los tipos de los depósitos en la misma proporción que lo han hecho en sus préstamos hipotecarios variables, que han ayudado a las entidades financieras a obtener beneficios récord.

Los depósitos bancarios españoles a un año ofrecían un interés de sólo el 0,42% en diciembre, frente al 1,34% que ofrecían los bancos de la zona euro, según datos del Banco Central Europeo (BCE).

En el contexto de las sucesivas subidas de tipos del BCE, empezaron a formarse colas frente al Banco de España, en el centro de Madrid, de inversores minoristas que buscaban maximizar la rentabilidad de sus ahorros y evitar las comisiones que exige la compra indirecta de deuda pública.

El martes, el Banco de España respondió pidiendo a los posibles inversores no registrados para comprar bonos a través de la página web del Tesoro que concertaran una cita para comprar en persona.

El Tesoro español avisó en su página web que un aumento exponencial de las solicitudes de compraventa de deuda pública a través de la sede del Tesoro y la necesidad de garantizar los máximos niveles de seguridad y fiabilidad estaban provocando una ralentización en los tiempos de respuesta de la página web.

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