La morosidad de la banca se mantiene en el 10% en febrero mientras el crédito se desploma
El volumen de préstamos cae un 3,8% interanual pese a las facilidades del BCE por la menor demanda ante la debilidad de la recuperación
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MADRID.- La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas se ha situado a un paso de bajar del 10% en febrero, y se ha mantenido en niveles mínimos registrados hace tres años y medio, según los datos provisionales hechos públicos este lunes por el Banco de España. En concreto, la morosidad ha alcanzado el 10,09%, una tasa que incluye el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito.
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La caída de la morosidad se ha producido en parte al mantenerse en febrero el descenso en el crédito global del sector. En concreto, se ha reducido en 6.564 millones, un 0,5%, hasta situarse en los 1,311 billones. En términos interanuales, el crédito global se ha reducido un 3,8%.
Sin incluir los datos metodológicos, la ratio de morosidad se colocaría en el 10,3%, puesto que el saldo de crédito caería hasta los 1,285 billones.
La cifra total de créditos dudosos cae en febrero en 1.022 millones, mientras que el crédito global se ha reducido en 6.564 millones
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Pese a todo, las entidades financieras aún mantienen sus provisiones prácticamente en el mismo nivel que el mes anterior, en los 79.045 millones. En enero, este colchón se situaba en 79.508 millones.
El Santander calcula que la tasa de morosidad de la banca cierre este año en el entorno del 8%,
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Por su parte, Banco Santander estima que la tasa de morosidad de la banca cierre este año en el entorno del 8%, ante el crecimiento económico, la mejora del mercado laboral y los tipos de interés en niveles históricamente bajos. "El entorno de crecimiento económico, mejora del mercado laboral y la política del BCE de mantener los tipos en niveles mínimos ha permitido una mejora en la carga financiera de familias y empresas en la capacidad de pago", ha explicado el economista del servicio de estudios del banco Tomás Riestra.