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Ofrecido por Turismo de Castilla-La Mancha

© Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

Cuenca, la escapada Patrimonio de la Humanidad que siempre sorprende

Tanto la capital conquense como la provincia ofrecen multitud de posibilidades para pasar unos días de descanso y empaparse de su rico patrimonio cultural, de su historia, su naturaleza en estado puro y, como no, de una gastronomía que no necesita presentaciones.

Tiempo de lectura del artículo: 12min

Cuenca es un destino ideal para una escapada de varios días. La ciudad atesora la distinción de Patrimonio de la Humanidad y es un magnífico lugar para hacer una visita con calma, reposada, y huir de las prisas. Cuenca tiene tantos atractivos que merece la pena pasear por su calles y entrar en sus rincones monumentales, aunque también es ideal para ser contemplada desde fuera, desde el otro lado del Júcar, y verla bañada por el sol o iluminada por la noche.

Los secretos de callejones, de sus fachadas y callejuelas no dejan indiferente, como tampoco lo hace su imponente Catedral y los monumentos de su Plaza Mayor, repletos de historia y de arte abstracto contemporáneo. La cultura y el arte se respiran en cada rincón de la ciudad de Cuenca, con museos de referencia nacional como e Museo de Arte Abstracto, que se asienta en las Casas Colgadas y exhibe de manera permanente una colección de pinturas y esculturas de artistas españoles de la generación abstracta de los años 50 y 60, que configuraron algunas de las tendencias más significativas del arte en España.

Es también de vista obligada el Museo-Fundación Antonio Pérez, que cuenta con obras repartidas por más de 30 salas y plantea un largo recorrido por el informalismo y el arte pop. Desde Andy Warhol al propio Antonio Pérez, pasando por Canogar y Chillida, Millares y el Equipo Crónica.

Museo de las Ciencias / © Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

Completan la visita a Cuenca el Museo de Paleontología, que alberga fondos procedentes de las intervenciones paleontológicas en los yacimientos conquenses de Las Hoya y Lo Hueco; y el Museo de las Ciencias, que tiene entre sus instalaciones permanentes un planetario y un recorrido por la historia de la Astronomía desde las primeras civilizaciones, valiéndose de personajes claves de la ciencia. Además, en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo, que reparte sus instalaciones entre Toledo y Cuenca, podremos admirar en la capital conquense la colección Roberto Polo en la antigua iglesia de Santa Cruz.

Una provincia con mucho encanto

No solo la ciudad de Cuenca cuenta con enormes atractivos. Muy cerca encontramos la Ciudad Encantada, un paraíso donde la naturaleza ha modelado las rocas con formas caprichosas, o la imponente Serranía de Cuenca que plantea multitud de actividades de turismo activo en un marco incomparable por su flora y su fauna.

© Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

Y es que la provincia de Cuenca posee una belleza extraordinaria, con pueblos como Belmonte y su imponente Castillo; o Priego, en la Puerta de la Serranía, que conserva una riqueza arquitectónica sinigual, como ponen de manifiesto el Palacio de los Condes, el Torreón de Despeñaperros o la iglesia gótica de San Nicolás de Bari y las casas blasonadas y de la Inquisición.

Y si eres amante de la naturaleza, no puedes perderte el Parque Natural de la Serranía de Cuenca y el Parque Cinegético de El Hosquillo.

Naturaleza en estado puro: Serranía de Cuenca y El Hosquillo

En el Parque Natural de la Serranía de Cuenca es donde se encuentra la Ciudad Encantada, declarada Sitio Natural de Interés Nacional y de obligada visita, y el Nacimiento del río Cuervo, que es Monumento Natural.

En el Parque Cinegético de El Hosquillo, creado en 1964, se crían especies para la caza sostenible. Podemos encontrar osos, lobos, cabras montesas, ciervos, gamos, corzos y jabalíes. Pero también truchas comunes y nutrias, además de aves como el peregrino, el águila real, el búho real y el buitre.

El Hosquillo / © Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

De hecho, en El Hosquillo el lugar más popular es el Rincón del Buitre. El entorno es espectacular y la visita está especialmente recomendada con niños. Todas las visitas son guiadas y cuentan con un marcado carácter pedagógico y divulgativo.

El legado romano de Noheda

Otro de los grandes atractivos de la provincia de Cuenca es el yacimiento visitable de Noheda, una villa romana de los siglos I a. C.-VI d. C.. Está situado a apenas 18 kilómetros de la ciudad de Cuenca y próximo a las ciudades de Segóbriga (58 km), Ercávica (44,5 km) y Valeria (43,5 km), también ciudades romanas.

Noheda es conocido internacionalmente por albergar el mosaico figurativo más espectacular de todo el Imperio Romano. Este yacimiento arqueológico está compuesto por restos inmuebles de una villa romana, habiéndose documentado varias habitaciones de lo que sería parte del edificio suntuario del complejo rural tardorromano.

© Yacimiento arqueológico visitable de Noheda

El Centro de Interpretación está dividido en varios espacios enfocados tanto al mundo romano en general como a la villa y sus mosaicos en particular. Es posible hacer un recorrido al detalle de todos sus elementos por apenas dos eruos que cuenta la visita, y el centro, además, es accesible para personas con discapacidad física.

Centro de interpretación / © Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

Segóbriga presume de Parque Arqueológico

Roma está muy presente también en la Meseta de la que fuera ciudad romana de Segóbriga, donde se han hallado importantes y bien conservados restos romanos, pero también de épocas posteriores. Segóbriga  llegó a albergar un teatro y un anfiteatro, utilizados en las grandes fiestas, como termas públicas, templos, destinados al culto imperial o a mercados mercados. Eran un punto de referencia de la Meseta como vida urbana al estilo romano.

Anfiteatro de Segóbriga / © Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

Actualmente, son visitables el acueducto, las necrópolis, la ciudad, el teatro, la muralla y puerta principal, el criptopórtico del foro, las termas del teatro, la basílica, el foro, el aula basilical, las termas monumentales, la acrópolis, la casa del procurador minero, el anfiteatro, el circo y la basílica visigoda. Su recorrido permite al visitante sumergirse en las raíces del Imperio y conlleva un desembolso de solo seis euros, la mitad en el caso de los niños.

Teatro / © Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

Cuenta, Capital Española de la Gastronomía 2023

La gastronomía tradicional conquense es tan tan variada como la propia geografía de la provincia, con platos con personalidad propia como el morteruelo, el ajo arriero, los chorizos, los clásicos zarajos, cordero, perdices, truchas, quesos y alajú. Mención especial merecen los excelentes vinos de la tierra y sus licores digestivos como el Resoli y el Aguardiente de la Sierra.

Tanto en Cuenca capital como en la provincia, resaltan los platos de la zona, elaborados con productos autóctonos. Podremos degustar de los mejores platos en establecimientos clásicos y en otros que se distinguen expresamente por su raíz culinaria, pero ninguno nos decepcionará.

Además, Cuenca está celebrando este año su título como Capital Española de la Gadtronomía 2023 con actividades y eventos como los showcooking, degustaciones y catas en espacios emblemáticos, la grabación del programa Masterchef de TVE, la celebración del Congreso del Bienestar y la Gastronomía de la Cadena Ser o la emisión de un sello de Correos y un cupón de la ONCE específicos, entre otros.

Mesas que brillan con luz propia

Tanto en Cuenca como en la provincia encontramos establecimientos de restauración reconocidos, como Casas Colgadas, que se encuentra en la capital conquense y debe su nombre al lugar donde se ubica. Se trata de una casa emblemática que reabre sus puertas de la mano del reconocido chef Jesús Segura y cuenta con la distinción de un Sol Repsol. Ofrece un único menú degustación de tinte actual , a base a productos de proximidad.

También en la capital se encuentra el Restaurante Raff San Pedro de Miguel Escutia, donde igualmente luce un Sol Repsol. Est en el corazón del casco antiguo de Cuenca, ubicado en unas antiguas caballerizas del siglo XVI. Su oferta gastronómica respeta la base de la cocina tradicional adaptada a nuestro tiempo, pero sin perder ni un ápice de la primitiva esencia de sus platos.

Raff San Pedro / © Turismo de Castilla-La Mancha | David Blázquez

En la localidad de Huerta del Marquesado se ubica otro restaurante con un Sol Repsol, esta vez de nombre peculiar: Fuentelgato. Allí. Olga García Y Álex Paz presentan una cocina libre y dinámica que se adapta al mejor producto y su temporalidad, apostando también por una carta de vinos muy amplia, pensada para acompañar los diferentes platos del menú. Fuentelgato ha conseguido crear un oasis que contribuye a revitalizar gastronómicamente la Serranía de Cuenca.

Son algunos ejemplos de la buena mesa de Cuenca, restaurantes embajadores de Raíz culinaria, toda una selección de establecimientos con interés gastronómico destacado, en base a su presencia en guías gastronómicas nacionales e internacionales, así como aquellos que han sido premiados en categorías profesionales, entre los que destacan también Casa de la Sirena, Setos, La Muralla, Mesón Nelia, Restaurante Seto, Olea Comedor, La Rebotica, Essentia, Figón del Huécar, el Complejo Enoturístico La Estacada, La Martina o Casa Marlo, en Cuenca capital, que regenta Maripaz Marlo, concursante de Top Chef en 2015.