Con las elecciones autonómicas a menos de un mes y el campo político plagado de incógnitas y controversias, Andalucía celebra hoy su autonomía. El Parlamento ha acogido el principal acto institucional del 28-F, el izado de bandera, con la presencia de todos los que, desde ahora al 25 de marzo, se juegan el poder en la comunidad. Mantener el tono de neutralidad institucional del acto, que se supone alejado de la refriega partidista, era hoy más difícil que nunca. Y así lo han demostrado los hechos.

El candidato del PP, Javier Arenas, favorito según todas las encuestas, ha cargado contra el Gobierno andaluz nada más aparecer, al filo de las 11.00. El motivo era el dato de déficit dado a conocer ayer por el Gobierno de Mariano Rajoy. Andalucía incumplió el objetivo, del 1,3%, llevándolo hasta el 3,22% (el déficit promedio de las comunidades fue del 2,94%). Arenas prometió “austeridad” para combatir el desfase, sin mención alguna a la desviación de las comunidades del PP. “Ya está bien de seguir el discurso de tapar el déficit real de Andalucía, nunca más presupuestos falsos [en referencia a las cuentas andaluzas], hay que decir la verdad a los ciudadanos', afirmó, antes de pedir al presidente andaluz, José Antonio Griñán, que no “mienta”.

Arenas, que confió en que las elecciones sean parte de una “primavera andaluza del cambio”, tenía a su lado a Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y Administraciones Públicas y máximo responsable de las políticas para contener el déficit. Montoro aprovechó también el acto para cargar contra las cuentas del Gobierno de Griñán, sin mencionar ninguna otra comunidad autónoma, pese a que el conjunto de las mismas incumple el objetivo de déficit. “Andalucía ha quedado en situación de incumplimiento, con una desviación importante que pone en riesgo a las empresas”, ha dicho.

El Día de Andalucía se ha celebrado en un clima preelectoral

El Gobierno andaluz respondió, tanto a través de su consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, como del propio presidente Griñán, que anunció que presentará alegaciones a las cifras del déficit andaluz al no haberse computado el montante de 1.504 millones de euros acordados en la Bilateral Junta-Estado y que son resultado 'de las inversiones de los ejercicios 2008 y 2009'. “Es un suicidio que el Gobierno se empeñe en que la única política es el control del déficit', ha afirmado Griñán, para quien Andalucía ha recibido 'un porcentaje menor de la inversión que se le debe en función de lo que dice su Estatuto de Autonomía'. Diego Valderas, candidato de IU a la presidencia, afirmó que el déficit es “un escenario que está poniendo en práctica el PP para atemorizar a la ciudadanía' y justificar sus recortes.

Al acto acudió el Gobierno regional en pleno, los líderes de los principales partidos de la oposición y representantes de instituciones, sindicatos, organizaciones empresariales.