José Luis Rodríguez Zapatero se comprometió ayer ante el Comité Federal del PSOE a culminar, en los 12 meses que restan de legislatura 'el año más importante para España', el proceso de reformas para 'la modernización de la economía', y lo hizo con una reivindicación expresa de su autonomía como jefe del Ejecutivo. 'Lo haré actuando con la autonomía con que debo actuar como presidente del Gobierno, como presidente que soy de todos los ciudadanos', afirmó.

Esta frase evoca la que pronunció Felipe González en un congreso del PSOE cuando se enfrentaba al sector encabezado por Alfonso Guerra, que tenía el control del partido. Pero, puesto que la situación actual difiere notablemente de aquella, sólo cabe interpretar su afirmación como un intento de asumir en primera persona el coste de las decisiones impopulares y quitar esta carga al PSOE, aunque también dio a entender que en ocasiones se ha sentido solo. 'Los últimos meses han sido todavía muy duros para la acción de Gobierno', apuntó.

'No es momento de balance, sino de acción', arenga a los suyos

A medio y largo plazo, Zapatero dijo no tener ninguna duda de que se acabará reconociendo la tarea del Gobierno. 'Cuando concluya esta crisis, y sólo concluirá cuando se cree empleo de forma estable, se podrá decir que logramos sentar los fundamentos de un modelo productivo renovado para garantizar nuestro bienestar, y que mientras lo hacíamos, no dejamos de velar por la máxima cohesión social', señaló.

Pero también reconoció que la crisis 'ha producido incertidumbre en ciudadanos que se identifican' con los socialistas, que les apoyan, sobre el sentido de su acción de Gobierno. No obstante, destacó que, para afrontar la situación, el Gobierno ha hecho 'ajustes, los imprescindibles', y también 'reformas, todas las necesarias', pero manteniendo 'intacta' su 'ambición por enriquecer el Estado social'.

Y ahora, según dijo, tiene 'claro el programa de acción para lo que queda de legislatura', que calificó de 'ambicioso' y 'realista', 'un programa de decisiones que no puede esperar y que hay que culminar ya'.

Reconoce que las reformas han creado 'incertidumbre' entre sus votantes

Indicó que una vez 'recuperada la estabilidad y asegurada la continuidad de la recuperación, el siguiente paso de este proceso es en buena lógica la intensificación del crecimiento y con él, la creación de empleo'. 'No va a ser fácil y tampoco rápido, pero para llegar ahí y para hacerlo cuanto antes, no vamos a bajar la guardia, vamos a completar la tarea en estos 12 meses'.

Además, anunció su propósito de defender las reformas con ocasión de los comicios del 22 de mayo, cuya precampaña arranca hoy en Murcia. Zapatero, tras reconocer que ha podido 'cometer errores', pero reivindicar también que siempre ha 'dado la cara' y se ha 'dejado la piel', anticipó que se va 'ocupar un poquito del PP porque el PP se ha ocupado mucho' de él.

Tras subrayar que la derecha 'lo apostó todo a que la crisis acabase derribando al Gobierno', proclamó: 'Llegar al último día de la legislatura será nuestro triunfo y el fracaso del PP'.

'No es momento de balance, sino de acción', arengó a los suyos ante la triple tarea que planteó: culminar las reformas, ganar las elecciones del 22-M y afrontar su sucesión. Para relajar los ánimos, tiró de vena feminista: 'Este partido tiene cerebro e inteligencia femenina y puede hacer las tres cosas'.