Basagoiti no logra cerrar las heridas en el PP vasco

Con la marcha de María San Gil de la dirección del PP vasco, los conservadores se quedaron huérfanos de uno de sus referentes morales. Después cayó otro: José Antonio Ortega Lara. El ex funcionario de prisiones, víctima de ETA, decidió seguir la misma dirección al considerar que el PP de hoy no es el mismo al que él se había afiliado. Ayer, la alcaldesa de Lizartza, otro de los referentes morales del partido, fue muy clara al sostener que el PP vasco que quedará configurado al fin de este congreso no cuenta con su respaldo. Es más, cree que no constituye “un núcleo de consenso ni de unión del partido”. No obstante, de momento, no parece dispuesta a seguir los pasos de San Gil y Ortega Lara. No ve incompatible su continuidad en el partido con el hecho de que el equipo de Basagoiti no sea de su agrado. “No tenemos por qué estar fuera del PP, si no trabajando dentro”, añadió.

El malestar de Otaola implica que el congreso no va a cerrar las heridas que presentaba cuando fue convocado.

Otaola, que se pensó dimitir cuando San Gil anunció su marcha, parecía haber vuelto a encontrar la confianza. De hecho, había mostrado su disposición a votar a Basagoiti. Pero ayer explicó que la gota que ha colmado el vaso de su paciencia ha sido que Iñaki Oyarzabal vaya a ocupar la secretaría general. No está dispuesta a apoyar una candidato que “dice que sobramos, que somos los radicales”. Por eso hoy votará en blanco.
Pese a que Basagoiti ha prometido integración y ayer aseguró que nadie va a poder quejarse de la nueva ejecutiva porque “van a estar todos”, Otaola no guarda muchas esperanzas. De hecho, los puestos relevantes en Euskadi, al igual que ocurrió en el PP nacional, no incluirán al sector crítico. “Las vicesecretarias suponen nuevas caras, juventud y renovación”, explican en el PP vasco.

Las mismas fuentes aseguran que, al igual que Basagoiti ha sido el candidato de consenso para presidir el PP, Oyarzábal es el secretario general que todos han acordado. Niegan así que el PP de Álava haya intentado imponer a su candidato. No obstante, su elección podría ser la forma de premiar a la mencionada provincia por ser aquélla por la que el PP vasco retiene más votos.

La alcaldesa de Lizartza, amenazada de muerte por izar la bandera española en el balcón del ayuntamiento de su localidad, cree que San Gil regresará “porque es joven”.

Mientras, el parlamentario Santiago Abascal desvelaba al cierre de esta edición que apoyará a Basagoiti. Además mostraba su alegría porque la ponencia política haya aceptado su enmienda a la hora de citar que PNV y EA no colaboran en la derrota de ETA. También, la que define al PP como un partido de “centro derecha”.

Dos de los discursos de la tarde de ayer recogieron menciones expresas a San Gil. El eurodiputado del PP y ex presidente de los conservadores vascos Carlos Iturgaiz, reivindicó un partido con las puertas “abiertas”, para pasar a decir después que el PP no puede permitirse “tirar nuestros diamantes al cubo de la basura”. Marcó un objetivo interno: “Hacer todo lo posible para que María San Gil pueda volver a brillar”.

Por su parte, Carmelo Barrio, todavía número dos, que defendió el informe de gestión también tuvo palabras de agradecimiento a su jefa. “Es lo mejor que hemos tenido en el partido y comparto al 100% todas las decisiones políticas que ha tomado”. También puso deberes a Basagoiti. Le pidió que profundice en las reglas del juego de sus antecesores en el cargo.

El líder del PP Mariano Rajoy acudirá hoy a cancelar el congreso. Ayer no quiso valorar las ausencias de San Gil y Mayor Oreja, que han optado por boicotear el congreso. El hecho de que San Gil no haya acudido al cónclave es ciertamente inaudito, ya que hasta hoy sigue siendo la presidenta del partido.

Con Oyarzabal de jefe y más mujeres

Basagoiti ha nucleado su nueva cúpula en torno al alavés Iñaki Oyarzabal, del ala blanda que combatió a San Gil. Además, lleva a muchas mujeres al poder. Entre ellas, a las diputadas autonómicas Arantza Quiroga y Laura Garrido. Ésta tendrá “gran peso” en la Ejecutiva. La cúpula queda así:

Antonio Basagoiti, presidente del PP vasco

Iñaki Oyarzabal, secretario general

Leopoldo Barreda, portavoz en el Parlamento vasco

Arantza Quiroga, vicesecretaria general

Esther Martínez, vicesecretaria de Organización

Juana Bengoetxea, vicesecretaria de Política Foral y Autonómica

Laura Garrido, vicesecretaria de Empleo y Bienestar

Juana Iturmendi, vicesecretaria de Libertades y Ciudadanía