Este artículo se publicó hace 14 años.
Blanco presenta la campaña del PSOE sin despejar la incógnita sucesoria
El vicesecretario general se remite al Comité Federal del sábado y se reserva su criterio "por lealtad"
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Gonzalo López Alba
La convocatoria para las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo es oficial desde ayer, pero la actualidad del PSOE sigue marcada por la ansiedad y la incertidumbre que caracteriza el proceso de sucesión de José Luis Rodríguez Zapatero.
Con la cita electoral estampada en el BOE, José Blanco reapareció ayer públicamente como coordinador de las campañas electorales de su partido, tras el paréntesis de las europeas de 2009, cuando esta competencia recayó en Leire Pajín, a la sazón secretaria de Organización.
Zapatero hará unos 15 mítines, desde el domingo hasta el cierre de campaña
Tuvo Blanco la ocasión de pinchar la expectación suscitada ante la reunión que el Comité Federal del PSOE celebrará este sábado, como el lunes de la semana pasada intentó hacer Marcelino Iglesias. Pero si el número tres del partido fue tajante hace nueve días al asegurar que se trata de "un comité ordinario en el que no habrá ninguna información extraordinaria", el número dos prefirió no quemarse los dedos, aunque sea al precio de mantener viva la incertidumbre y la expectación.
Blanco se refugió en su criterio de "no matizar ni añadir nunca nada" a lo que dicen otros compañeros de partido, y menos si forman parte de la dirección. También se acogió a la pauta marcada el viernes pasado por Zapatero: "Los temas del Comité Federal en el Comité Federal, como ha dicho el presidente del Gobierno". Y, por último, a su "compromiso" con Zapatero: "Por sentido del deber y de lealtad, no daré mi opinión hasta que el presidente del Gobierno nos comunique su decisión".
El vicesecretario general del PSOE se limitó a repetir la doctrina oficial de que Zapatero "tomará la mejor decisión para los intereses de España y los intereses del partido", e hizo cuando pudo por evitar que la presentación de la campaña para las elecciones del 22-M se viera contaminada por el enredo sucesorio. Pero lo logró a medias, si es que lo logró.
Rubalcaba estará en cinco actos de la precampaña y Chacón, en cuatro
Rubalcaba y ChacónDesde primera hora de la mañana se repicaban en todos los medios las penúltimas declaraciones de Guillermo Fernández Vara sobre el asunto. El presidente de Extremadura, que el lunes había expresado su determinación de no volver a hablar del tema, se enmendó en la web de la revista Vanity Fair.
Fernández Vara insistió en la tesis de que "cuanto más tarde" Zapatero en hacer pública su decisión, será "peor". Se reafirmó en que, a su juicio, Alfredo Pérez Rubalcaba es quien en estos momentos "mejor sintetiza" la "opinión mayoritaria del partido" y "el que mejor lo haría en el corto plazo", pero también reconoce que el vicepresidente "no representa el futuro del partido en el medio y largo plazo" y, en referencia a Carme Chacón, dijo que le "gustaría mucho que en España hubiera una mujer presidenta del Gobierno". Además, introdujo otro factor para la polémica al defender que el candidato electoral debe ser también el secretario general del partido, lo que exigiría la convocatoria de un congreso antes de las elecciones, opción que no figura en la hoja de ruta oficial.
Vara dice ahora que el candidato debería ser también secretario general
Blanco no quiso comentar las declaraciones de Vara. Pero no le quedó más remedio que hablar de Rubalcaba y de Chacón, las dos personas en las que, a expensas de que pueda surgir algún tapado, se centran todas las miradas como los posibles sucesores de Zapatero.
Ante la ofensiva lanzada contra Rubalcaba a cuenta del caso Faisán, Blanco salió en su defensa. Lo hizo en unos términos en los que, inevitablemente, tal ofensiva quedó vinculada con el proceso sucesorio en el PSOE: "Al PP le preocupa más la fortaleza de Rubalcaba que debilitar a ETA".
De Chacón tuvo que hablar cuando se le preguntó por la participación de la ministra de Defensa en la campaña del 22-M. "Tiene actividad preelectoral prácticamente todos los fines de semana", dijo para desmentir que sea muy limitada. La plantilla para la precampaña que ayer adelantó Blanco, y que cubre desde el viernes, 1 de abril, hasta el 30 de abril, incluye cuatro mítines de Chacón y cinco de Rubalcaba.
Los coordinadores regionales volverán a reunirse tras el Comité Federal
José Luis Rodríguez Zapatero protagonizará seis todos los fines de semana, contabilizado un doblete en Canarias,más "ocho o nueve" durante el periodo de campaña, para el que la agenda no se ha cerrado todavía a expensas de sus obligaciones como presidente del Gobierno. En total, unos 15. El primero será este domingo, en Murcia, una plaza que se ha elegido para simbolizar que Zapatero se batirá el cobre hasta el último día y que "no hay más batalla perdida que la que no se da".
Ganar sin ser candidatoA pesar de esta "intensa" participación electoral del presidente, Blanco justificó la anulación del macromitin previsto en la plaza madrileña de Vistalegre en el propósito de "no desvirtuar el sentido de la campaña" del 22-M. El PSOE la plantea como "13 campañas", ya que en cada comunidad autónoma se desplegarán "mensajes específicos, adaptados al contenido de nuestras propuestas y a la personalidad de los candidatos".
Destaca que los gobiernos en liza deciden el 80% del bienestar social
El PSOE intentará conjugar su disposición a "no rehuir ningún debate", con el rechazo a la pretensión del PP de convertir estos comicios en un plebiscito sobre Zapatero. "Toda la aspiración del PP es que Rajoy gane algo, alguna vez. Como nunca ha ganado nada, quieren que gane ahora, aprovechando que no es candidato. Ellos pedirán el voto para Rajoy, nosotros para que ganen los ciudadanos", subrayó el coordinador de la campaña.
Las cosas "cotidianas"Blanco hizo hincapié en que los ayuntamientos y los gobiernos autonómicos son los gestores de la mayor parte de las cosas "cotidianas" que afectan a la vida de los ciudadanos, desde el momento en que se levantan y "abren el grifo de agua". "Más del 80% de las cuestiones que determinan nuestra calidad de vida se decide en los ayuntamientos y en las comunidades autónomas", subrayó. En consecuencia, según añadió, la pregunta del 22-M es "quién quiere cada ciudadano que se ocupe de su bienestar, del bienestar de los suyos y del bienestar de todos los demás".
Blanco critica al PP por buscar que el 22-M Rajoy "gane algo, sin presentarse"
Para ayudar a dar con la respuesta, puso ejemplos concretos de las cosas que el PSOE espera que los ciudadanos valoren con su voto: "El PP dice que la culpa de todo es de Zapatero, pero la culpa de lo que ocurre en la sanidad valenciana es de Camps, la culpa del fracaso escolar en Murcia es de Valcárcel...".
Blanco sostuvo que el PSOE no podía comenzar mejor esta campaña porque presenta más candidatos que nunca 75.000 en más de 7.600 municipios. Agregó que, a partir de ahora, "todos los socialistas concentramos todos nuestros esfuerzos en responder a la pregunta de estas elecciones" y "no seremos nosotros los que desviemos la atención de lo que se decide el 22 de mayo".
Pero el hecho es que el debate sucesorio sigue consumiendo las energías y desviando la atención, por lo menos hasta el sábado. El pronóstico más extendido es que Zapatero no anunciará públicamente su retirada ese día, aunque dirá algo para atajar la controversia. No obstante, como advirtieron a Efe miembros del grupo parlamentario, "no sería la primera vez que Zapatero sorprende con un anuncio cuando menos se lo espera nadie".
Antes de la próxima reunión de coordinación con los responsables de las campañas regionales, convocados para el martes, el PSOE tendrá que cruzar el puente del Comité Federal.
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