Este artículo se publicó hace 14 años.
Calor de agosto en el arranque de junio
La Aemet activa la alerta amarilla por temperaturas extremas en el sur
Quedan tres semanas para que el verano comience de manera oficial, pero las altas temperaturas ya se han instalado en buena parte de España, sobre todo en la mitad sur. Un total de 13 provincias de Andalucía, Murcia y Canarias estuvieron ayer en alerta por el calor, que alcanzó casi los 40 grados en áreas de Cádiz, Córdoba, Jaén, Málaga y Sevilla. El mercurio marcó 36 grados en algunos puntos de la Región de Murcia, y 34 grados en el archipiélago canario.
La sensación de bochorno y el calor intenso será la nota dominante esta semana, sobre todo en el sur, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La situación será distinta en el norte, donde podría llover débilmente en la cornisa cantábrica y en las áreas de montaña del centro peninsular. El fin se semana, estas lluvias caerán en forma de tormenta debido, precisamente, a la canícula.
Otro de los efectos de la llegada de este verano anticipado ha sido el aumento brusco de los niveles de polen y sus efectos sobre los alérgicos, que se enfrentarán a grandes picos de polinización hasta finales de este mes. Entre el 9% y el 15% de los españoles alérgicos al polen sufre las consecuencias clásicas de esta enfermedad que produce desde picores, estornudos y lagrimeos hasta rinitis y asma.
Plan contra el calorPrecisamente hoy, la Consejería de Salud andaluza presenta su Plan contra las Altas Temperaturas, dirigido sobre todo a evitar los fallecimientos por golpes de calor en los grupos de riesgo (bebés, ancianos, enfermos crónicos y personas que realizan esfuerzos físicos en el exterior).
Este plan de actuaciones preventivas, que ya se ha activado en Canarias, Murcia y Andalucía, estará activo hasta el 15 de septiembre, después de que el Ministerio de Sanidad y Política Social lo haya trasladado a las autonomías.
Sanidad aconseja seguir una serie de consejos para combatir las temperaturas extremas: beber con frecuencia agua o líquidos sin esperar a tener sed, evitar el alcohol, refrescarse con una ducha, tomar comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (ensaladas, frutas, verduras, zumos...), buscar la sombra, cubrirse la cabeza y usar ropa y calzado fresco, entre otros.
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