Chávez ordena detener al testigo que lo acusó de proteger a ETA

La Fiscalía General de la República de Venezuela tardó pocas horas en reaccionar tras conocerse que el funcionario del Ministerio de Agricultura Arturo Cubillas, acusado de ser el responsable de ETA en el país, se había presentado voluntariamente para pedir ser investigado.

Por un lado, designó al fiscal Richard Monasterios para llevar el caso Cubillas. Y por otro, solicitó a Interpol la alerta roja contra el general Néstor González, testigo protegido que va a declarar contra el funcionario el 15 de noviembre ante Eloy Velasco, juez de la Audiencia Nacional. La policía internacional puede detener a González en cualquier puerto o aeropuerto.

Interpol puede detener al general en cualquier puerto o aeropuerto

Este general retirado está acusado de rebelión civil por el golpe de estado contra Chávez del 11 de abril de 2002 y tiene en su contra una orden de aprehensión desde 2006. González fue máximo responsable de una zona fronteriza entre Venezuela y Colombia donde actuaban las FARC y donde supuestamente fueron entrenadas por integrantes de ETA. "No quieren que González atestigüe en el juicio contra ETA en Madrid", denunció Diego Arría, el otro testigo protegido, antiguo embajador venezolano en la ONU.

El general ha acusado a Chávez de "complicidad" con las FARC, a las que habría "apoyado" en territorio venezolano. Estas declaraciones reiteradas llevaron a la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y a la Plataforma Democrática de Venezolanos en Madrid a proponer su nombre ante la Audiencia.

El presunto etarra Arturo Cubillas, mientras tanto, sigue recibiendo el apoyo de parte del oficialismo tras su presentación ante la fiscalía. El encuentro fue breve. "Está cantado que siempre que quieren enturbiar las relaciones entre Venezuela y España me utilizan a mí", se quejó ante el fiscal que le recibió.

El funcionario, que posteriormente emitió un comunicado, estuvo acompañado de Marino Alvarado, prestigioso defensor de derechos humanos. "Cubillas está incómodo por culpa de todas estas acusaciones", desveló Alvarado a Público. "Yo estoy bastante seguro de su inocencia. Conozco lo que han hecho Cubillas y el resto de refugiados vascos desde que llegaron a Venezuela en 1988".

Cubillas se queja de que se le use para enturbiar las relaciones bilaterales

Todo ello ocurre una semana después de que se conociera la confesión de los etarras Atristain y Besance, que señalaban a Cubillas como principal responsable del entramado de ETA en Venezuela y de los entrenamientos recibidos en el país suramericano. El próximo paso del fiscal será llamar a declarar a Cubillas.

El escrito presentado por Cubillas ante el fiscal insiste en las mismas tesis que el comunicado de refugiados vascos en Venezuela, hecho público pocas horas antes en la web chavista Aporrea, en el que mostraban "su rechazo a las campañas sistemáticas que desde el estado imperialista español se vienen realizando contraVenezuela". Según este comité, los dos militantes vascos "fueron torturados y sus declaraciones forjadas".

En principio, según el propio Alvarado, el fiscal sólo puede investigar los nexos entre Cubillas y ETA, "ya que no tiene competencias en España".

El Movimiento Periodismo Necesario, muy próximo al Gobierno, salió también ayer en defensa de Goizeder Odriozola, "víctima de la apetencia por la desinformación internacional" y atropellada "por la canalla mediática internacional". La esposa de Cubillas, de origen vasco, es actualmente una de las más estrechas colaboradoras del vicepresidente Elías Jaua, una de las figuras emergentes del chavismo y antigua directora del despacho de la Presidencia.