ERC presiona al Govern para que asuma un fallo adverso

ERC no quiere prisas el día en que se haga pública la sentencia del Tribunal Constitucional (TC). Los republicanos dan por hecho que el fallo sólo puede ser adverso o muy adverso y por eso pretenden que, desde ya, los partidos catalanes, con el president José Montilla al frente, consensúen respuestas ante lo que se avecina.

La portavoz de ERC en el Parlament, Anna Simó, declaró a la Agència Catalana de Notícies que los partidos deben "reconocer la posibilidad" de la sentencia adversa. Esperar a que el TC valide el Estatut por completo (como hacen sus socios de PSC e ICV) no provoca otra cosa que "invalidar la posibilidad de empezar a trabajar", dijo.

Los republicanos buscan llevar a sus socios a una respuesta contundente que escenifique el no acatamiento del fallo, sea cual sea. Simó no descartó que una discrepancia en la reacción conlleve un adelanto electoral. Justo lo contrario de lo que un día antes declaró su jefe de filas, Joan Puigcercós.