Las labores de limpieza del fuel detectado el martes a tres kilómetros de la costa valenciana han retirado 6.000 litros brutos de vertido (agua y fuel), con lo que la situación aparentaba estar controlada. Sin embargo, las playas valencianas de La Malvarrosa y La Patacona recibieron ayer por la tarde nuevos restos de combustible, según confirmó a Efe la Delegación del Gobierno.

El personal de limpieza de la empresa pública TRAGSA desplazó 40 unidades para la limpieza de estos residuos. En La Malvarrosa se detectaron “pequeñas virutas” de fuel, mientras que en la otra playa afectada, La Patacona, los restos eran mayores, hasta de cinco centímetros, aunque estaban más esparcidos. Los primeros análisis apuntan a que el vertido ha podido ser accidental, porque el fuel recogido es “muy denso”, “viejo” y “emulsionado”, lo que significa que ha estado sometido al “paso del tiempo” por la acción del sol y del mar, explicó el capitán marítimo de Valencia, Felipe Cano. Así, se cree que se vertió fuera del Puerto y la corriente lo arrastró hacia la costa. También se descarta una acción intencionada, porque es una variedad cara.

De confirmarse esta hipótesis, resultaría difícil encontrar al buque infractor. Se está investigando a 18 barcos que transitaron por el Puerto de Valencia en las últimas 48 horas, aunque tan sólo se encuentran retenidos cuatro. El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, advirtió que el culpable del vertido “dará cuenta de sus actos”.