Una gobernanza económica "seria y suficiente" para la UE

José Luis Rodríguez Zapatero, ha comparecido hoy ante el Parlamento Europeo para exponer las prioridades de la Presidencia española de la UE. El presidente del Gobierno defendió la necesidad de una mayor cooperación económica entre los estados y una gobernanza "seria y exigente" con los objetivos que se marquen para garantizar el crecimiento y el bienestar.

En lo económico, Rodríguez Zapatero apostó por incrementar "el sentido de la responsabilidad" de los estados y por dotar a las instituciones comunitarias de "nuevas facultades de dirección y de consecución de objetivos".

Subrayó que en los últimos diez años la dependencia energética de la UE ha aumentado nueve puntos, lo cual supone que cada año 67.000 millones de euros son transferidos desde los estados miembros a otros países, una cantidad equivalente a la inversión pública en I+D+I de toda la UE.

Defendió por ello el impulso de un mercado común energético mediante el fomento de las interconexiones, sobre la premisa de que no se han cumplido los objetivos trazados en 2002, y la implantción de un marco regulador común.

El presidente abogó también por "levantar barreras" en el mercado digital, y por una industria sostenible, de la que puso como ejemplo la intención de desarrollar el vehículo eléctrico como instrumento para reducir la dependencia energética, luchar contra el cambio climático e impulsar la innovación tecnológica.

Para Rodríguez Zapatero, el debate en el Consejo Europeo y el diálogo con el Parlamento Europeo deben propiciar una Estrategia 2020 que incluya "una gobernanza seria, exigente" con los objetivos acordados a partir de esas prioridades.

En este sentido, aseguró que la Presidencia rotatoria española será "leal y colaboradora" con las nuevas instituciones creadas por el Tratado de Lisboa, a las que quiere otorgar "el valor" que ese texto les concede.

Rodríguez Zapatero se comprometió a impulsar los nuevos instrumntos que ese Tratado aporta para acercar la Unión Europea a los ciudadanos, como la iniciativa legislativa popular, y a avanzar en nuevos derechos de ciudadanía, especialmente en la lucha contra la violencia de género, una lacra "impropia e inasumible" para la UE.

Alertó además de que la seña de identidad de la Unión es, junto a la democracia, el bienestar y la cohesión social, y por ello se mostró partidario de renovar "un gran pacto social en Europa con empresas y trabajadores" para desarrollar la Estrategia 2020.