La Iglesia, a favor del velo

El mismo día que las dos niñas del colegio Severo Ochoa de Ceuta se reincorporaban a las aulas después de que Educación obligara al centro a admitirlas aunque portaran velo, el cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, lanzaba una defensa sobre aquellos asuntos que se consideran fundamentales para una religión. Preguntado por los periodistas sobre el uso del hiyab en los centros escolares, Cañizares respondió que el debate no se puede zanjar con "un sí o un no", sino centrarlo.

Además, añadió que el respeto a la libertad religiosa "es para todas las religiones". No obstante, a su juicio, los inmigrantes "deben asumir" las costumbres del país al que llegan, sin que ello implique que "su presencia no pueda enriquecer, y enriquece de hecho, al país que los acoge".

Su respeto al velo lo justificó en que "aquello que en las distintas religiones es fundamental como expresión, rito o manifestación religiosa debe mantenerse", añadió la agencia Efe. En este sentido, precisó que si fuera "otro móvil" ajeno al religioso el que lleva a las alumnas a llevar el velo, esto "sería algo que no tendría justificación".

Marcha atrás

Esta actitud tolerante de Cañizares hacia los símbolos religiosos contrasta con la expresada hace unos días por la Conferencia Episcopal Española (CEE). En el seno de los obispos, no sentó muy bien que la editorial católica SM haya publicado un manual sobre el Islam destinado a los alumnos de Primaria que han escogido esta asignatura.

En relación al tema del velo en la escuela, la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), a la que pertenece el colegio de Ceuta al que las niñas regresaron ayer, sugirió a la comunidad educativa que escolarice a las pequeñas en otro centro educativo en el que su reglamento permita el uso de hiyab. María del Mar Sánchez, directora del centro, explicó a Público que el asunto lo resolverá de modo definitivo el Ministerio de Educación. "Y si en esa decisión se dice que nos hemos equivocado, pues rectificaremos". Sánchez aclaró que mientras se resuelve, se permite a las niñas asistir a clase para garantizar el derecho a la educación.

Desde la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT, su secretario general, Carlos López Cortiñas, llama a poner sentido común en esta polémica. En el sindicato, consideran que es necesario respetar la interculturalidad, pero que el velo es incompatible en clases como la de gimnasia.