El director general de la Policía y de la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, ha dado instrucciones para elevar la alerta antiterrorista al grado de 'alta intensidad', dentro del nivel 2 del Plan de Prevención y Protección Antiterrorista.

El pasado 29 de diciembre, el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, activó el nivel de alerta 2, que implica un riesgo probable de atentado terrorista. La decisión se adoptó, entre otros motivos, por los riesgos derivados de la Presidencia de España de la Unión Europea.

En aquella ocasión, el director general de la Policía y de la Guardia Civil determinó el grado de 'baja intensidad' dentro de ese mismo nivel de alerta.

Sin embargo, el ministerio dirigido por Alfredo Pérez Rubalcaba alude ahora a 'recientes acontecimientos', que no explicita, y a informaciones que aconsejan elevar la alerta a 'alta intensidad' dentro del nivel 2. La situación no variará en todo el territorio nacional hasta el fin de la Presidencia Española de la Unión Europea, el 30 de junio.

Algunos de los 'acontecimientos' que han podido contribuir a que el Ministerio tome la decisión de elevar el nivel de alerta se encuentran el robo de vehículos, el pasado martes, en las cercanías de París por parte de miembros de ETA -seguido de un tiroteo en el que murió un gendarme francés-.  Expertos en la lucha antiterrorista interpretaron de los sucesos que la banda preparaba una acción de envergadura.

El Ministerio del Interior modificó en junio de 2009 el Plan de Prevención y Protección Antiterrorista.

El cambio implicó aumentar de tres a cuatro los niveles de alerta con el fin de que pasar de una fase a otra no fuese demasiado 'traumático'.

Pase lo que pase, y mientras se mantenga la amenaza terrorista de ETA, España se situará, como poco, en el nivel uno (amenaza media, riesgo potencial de atentado terrorista), aunque también existe el cero.

El nivel 2, que es el que se encuentra activado en la actualidad, implica un un riesgo 'probable' de atentado terrorista.

Hasta las modificaciones aplicadas el año pasado, el nivel 3 suponía sacar a la calle a las unidades del Ejército para proteger puntos neurálgicos del país, como aeropuertos y centrales nucleares. Sin embargo ahora se utiliza cuando se considera que existe un 'riesgo altamente probable de atentado terrorista'.

El nivel 4 significa que la amenaza es extrema y que existe un 'riesgo de atentado terrorista inminente'. Es entonces cuando el Ejército debe salir a la calle para vigilar los puntos más sensibles.

Los diferentes niveles contemplan una serie de actuaciones tanto de vigilancia como de prevención y disuasión en función de la amenaza y prevén la colaboración con los servicios de seguridad privada (nivel 1) y con lasFuerzas Armadas, que serán alertadas para su eventual intervención en el nivel 3 y cuya colaboración está prevista en el nivel 4. En el nivel extremo (4), se prevé igualmente la activación del Equipo Policial de Apoyo ante grandesataques terroristas, creado en 2005.

El secretario de Estado de Seguridad es el encargado de elevar o reducir los niveles de alerta, mientras que el grado de intensidad es una decisión que corresponde al director general de la Policía y de la Guardia Civil de de acuerdo con la información operativa disponible.