El lehendakari, Patxi López, pidió ayer a la izquierda abertzale que 'no se pare ni retroceda' en los pasos dados hasta ahora porque parece que sólo 'avanza' cuando se siente 'presionada' por una posible ilegalización o una condena judicial, y lamentó que el diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, homenajee 'todos los días a los asesinos de las víctimas'. Además, afimó que la existencia de ETA 'es una amenaza inaceptable' y ha destacado que su fin no puede ser 'objeto de regateo' a cambio de presos.

En una entrevista concedida a la Cadena SER, López destacó cómo le 'repugnó' oír al diputado general de Gipuzkoa afirmar que 'no había llegado el momento' de las víctimas, cuando él 'pretende homenajear todos los días a sus asesinos'.

Blanco: 'Cuanto más débil está ETA, más preocupado está el PP'

Tasmbién recordó las críticas del PP al candidato del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. 'Me hierve la sangre', dijo, 'cuando escucho acusaciones que son inmorales, porque es inmoral e, incluso indecente, utilizar al terrorismo para sacar al adversario político, precisamente, al ministro del Interior que nos ha traído hasta el momento actual, al de mayor debilidad de la historia de ETA, a su tiempo final', ha añadido.

Sobre esta cuestión, que levanta ampollas en las filas socialistas, también se pronunció el portavoz del Gobierno, José Blanco. 'Estamos viendo cómo se acerca el final' de ETA y existe 'demasiado nerviosismo' en el principal partido de la oposición. 'Cuanto más débil está ETA, más preocupado está el PP', censuró Blanco en una entrevista cocncedida a Onda Cero en la que también reconoció que esta actitud le genera 'zozobra e inquietud'.

El portavoz del Gobierno confirmó que los miembros de Bildu 'están siendo observados' y garantizó que quien tiene la responsabilidad de actuar, si observara que contravienen la ley en algún momento, 'actuaría sin lugar a dudas'.

Los conservadores desempolvan los GAL para atizar a Rubalcaba

El que siguió adelante con la estrategia de incorporar el terrorismo a la campaña fue el vicesecretario de Política Territorial del PP, Javier Arenas. Evitar hablar de ETA en campaña 'siempre se plantea' cuando 'uno tiene mala conciencia y graves responsabilidades', señaló. Así que ayer dio un paso más allá y aseguró que el PSOE no está para 'presumir de hoja de servicios' en la lucha contra ETA y aludió a asuntos como el GAL o el caso del chivatazo a ETA en el bar Faisán.

En declaraciones en la Cadena COPE, Arenas reafirmó sus recientes declaraciones sobre el terrorismo y volvió a acusar a los socialistas de querer negociar con ETA. 'El PSOE siempre ha tenido un margen para la negociación con esas instancias, y de hecho ahí está lo que pasó en la legislatura pasada', enfatizó.

Después de asegurar que 'muy cerquita está el asunto Faisán y ya con más lejanía' se pueden recordar 'el GAL y otras cosas', Arenas no tuvo reparo en añadir que lo que hace falta 'es mantener la unidad contra los terroristas, desear su derrota', manifestó.