'Recortes militares, sí; recortes sociales, no. No OTAN, ni bases'. El lema es parecido al de manifestaciones anteriores, pero a la protesta de este año se suma un razón más: la implantación del escudo antimisiles en Rota (Cádiz) anunciada por el Gobierno. Decenas de personas se concentraron ante la base militar de Morón de la Frontera (Sevilla) como antesala a la tradicional marcha de Rota, que se celebrará el próximo domingo, y una tercera que se celebrará en el Campo de Gibraltar.

Los participantes realizaron una marcha a pie de unos tres kilómetros por la carretera A-360. El recorrido finalizó ante la puerta de la base de Morón, donde fue leído un manifiesto en el que se exigió la retirada de las tropas de Afganistán y el recorte o supresión de los gastos militares. 'Las tierras donde se asientan las bases han sido arrebatadas a sus ciudadanos y ahora en ellas se prepara la guerra porque de ahí salen los aviones y barcos que van a bombardear las poblaciones más allá de este territorio', lamentó el portavoz de la Plataforma Andaluza contra las Bases Militares, Enrique Luna.

La plataforma denuncia, además, la 'frialdad' con la que se 'miente a la población' al tratar de justificar 'un nuevo sistema amenazante de armas estratégicas con el señuelo de que creará puestos de trabajo en la Bahía de Cádiz'.

A la marcha también acudió el secretario general del Partido Comunista de España (PCE), José Luis Centella, quien destacó que es 'inmoral que haya gastos militares tan desproporcionados'. Por su parte, el secretario general del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero, criticó que 'la economía de guerra' del sistema capitalista.