Mientras el juego continúa para ver quién saca más rédito político tras las decisiones de Vic y Torrejón, las primeras voces de alarma empiezan a hacerse notar. El Movimiento contra la Intolerancia ha advertido de que las negativas de los ayuntamientos de Vic y de Torrejón de Ardoz (Madrid) a empadronar a inmigrantes en situación irregular 'han disparado la agitación xenófoba en toda España', por lo que pidió a las instituciones 'mensajes firmes' para acabar con esta situación.

Así lo declaró a Servimedia el presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, quien manifestó que tras salir a la luz los casos de Vic y Torrejón, se ha producido una reacción de la ultraderecha apoyando a estos ayuntamientos.

Según dijo, además hay otros consistorios con concejales populares que quieren seguir los pasos de Torrejón de Ardoz y de Vic, lo que, a su vez, ha provocado mayor 'agitación en Internet' no sólo contra los 'sin papeles', sino contra la inmigración en general.

Para Ibarra, un ejemplo de que el PP está instigando la xenofobia son unas declaraciones de la presidenta catalana de este partido, Alicia Sánchez Camacho, que ha anunciado que entre los ejes de su campaña a la Generalitat se encuentra el fin de la inmigración irregular, porque, a su juicio, 'el padrón no puede ser la puerta de entrada de la inmigración ilegal y en Cataluña y España no cabemos todos'.

Por otra parte, Ibarra dijo a los empresarios catalanes que 'deberían esforzarse en evitar cualquier tipo de economía sumergida' y no de ligar la delincuencia con la inmigración, como ha hecho Josep González, presidente de la patronal de la pequeña y mediana empresa de Cataluña Pimec.

González ha pedido el endurecimiento de las leyes y más presencia policial en Barcelona para combatir la inseguridad de ciudadanos, turistas y comercios, vinculada, según él, a la inmigración.