La Policía impide a los indignados rehacer el punto informativo de Sol

Los indignados habían planeado iniciar ayer mismo la construcción de un nuevo punto de información del

15-M en la Puerta del Sol, la misma instalación cuyo desmantelamiento desencadenó las movilizaciones de la semana pasada. Pero no lograron su objetivo. Efectivos de la Policía Municipal lo impidieron, bajo amenaza de multa, todas las veces que lo intentaron. Los agentes mantuvieron todo el día bajo vigilancia a los indignados y les obligaron a tirar los materiales que iban a utilizar en la construcción de la nueva estructura.

La idea de recuperar el punto de información partió de la asamblea del pasado lunes donde los participantes debatieron cómo modificar la instalación para evitar que pudiese ser utilizada para pernoctar o recaudar dinero en nombre del movimiento. El nuevo punto iba a ser fijo y más pequeño que el anterior. Una estructura rectangular, sin paredes, apoyada sobre la verja de la estatua ecuestre de Carlos III.

Sin embargo la Policía se encargó de frustrar los planes de los indignados y devolver la iniciativa a la asamblea, que ahora tendrá que buscar una solución ante una eventualidad con la que ninguno había contado en la discusión que tuvo lugar el lunes.

El que sí permanecía ayer operativo es el punto de información provisional levantado el mismo viernes que se reabrió la plaza de Sol. La incógnita es cuánto tiempo tolerará la Policía esta instalación.

El fallido punto de información iba a servir de referencia para turistas y curiosos que aún acuden al kilómetro cero en busca de información sobre las actividades de los indignados.

Miembros del 15-M recordaron que allí no sólo se facilitaría información del movimiento, sino que también se recogerían firmas para las iniciativas en marcha y se coordinaría a los participantes que quieren colaborar en los proyectos de los indignados.

Esta tarde a las 20 horas se celebrará un nuevo foro en Sol dedicado a la visita del Papa. Todavía no hay consenso sobre acciones concretas, pero lo que sí acordaron los indignados en la asamblea general del pasado domingo fue que en ningún momento se atacará al cristianismo o sus creyentes y que únicamente se denunciará la financiación pública de actos religiosos.

Nueve de los indignados que aseguran haber sido objeto de maltrato policial los días 7 y 8 de agosto en Málaga presentaron ayer denuncia por lesiones. Aseguran que la Policía les agredió cuando se encontraban reunidos en una asamblea "legalmente convocada, que no estaba cortando el tráfico ni producía ninguna alteración del orden público".