El Partido Popular está indignado con el PSOE por la designación del alcalde tránsfuga de Benidorm, Agustín Navarro, como candidato independiente. En una carta escrita por el vicesecretario general de política autonómica y local del PP, Javier Arenas, al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, los conservadores denuncian 'el incumplimiento flagrante' del Pacto Antitransfuguismo. 

'Con la decisión adoptada por el máximo órgano del PSOE', asegura Arenas, se 'incumple uno de los compromisos más importantes contenido en el Pacto Antitransfuguismo, concretamente el que hace referencia a no presentar como candidatos a concejales y alcaldes tránsfugas'. 

Arenas critica que Zapatero dijera en su momento que iba a aplicar 'estrictamente' dicho pacto, algo que para el conservador 'evidentemente ni han cumplido, ni usted ha cumplido su palabra'. 

'Entiendo que con esta decisión, sin duda avalada por usted como Secretario General, el PSOE ha decidido romper y dar por concluido el Pacto Antitransfuguismo', concluye la misiva. 

Sin embargo, el PP no queda al margen de casos de transfuguismo. Tal y como recordó el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, los conservadores llegaron a la alcaldía del propio Benidorm, con Eduardo Zaplana a la cabeza, gracias a un caso de transfuguismo. 

Los casos de transfuguismo del PP no se limitan al País Valencià. También se han dado en otros territorios. En Galicia, por ejemplo, fueron muy sonados los de Silleda, Gondomar y Mos, todos en Pontevedra. Ayer, el portavoz del Grupo Parlamentario del Partido Popular de Galicia, Manuel Ruiz Rivas, consideró que su formación estaba ahora 'legitimada para estudiar' el incumplimiento del pacto después de lo ocurrido con Navarro.

Es más, en esta legislatura municipal, 41 alcaldías han cambiado de color político ante mociones de censura auspiciadas por tránsfugas. Desde 1999, la comisión de seguimiento ha estudiado 613 denuncias y ha declarado 204 casos de transfuguismo. Tras las elecciones de 2007, el cambio de bando político se tradujo en 24 ayuntamientos menos para el PSOE y siete para el PP. Por otro lado, los conservadores conquistaron 17 corporaciones locales y el PSOE, 12. 

El Pacto Antitransfuguismo fue firmado por las principales fuerzas políticas en 1999 y se renovó por última vez en mayo de 2006.