Este artículo se publicó hace 17 años.
El PSOE da por hecho que PNV y BNG "salvarán" hoy a Álvarez
El Grupo Socialista moviliza a todos sus diputados y a dos tránsfugas para la apretada votación
El Gobierno y el PSOE contienen de nuevo la respiración para una nueva votación ajustada, movilizan a todos sus diputados y negocian contrarreloj con los partidos minoritarios en busca de votos.
Esta vez se trata de que no prospere la moción de Izquierda Unida que incluye la reprobación o petición de destitución de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez.
Los partidarios de la moción proceden de la derecha y de la izquierda y superan los 170 diputados teóricos. Son los cinco de IU, ocho de ERC, diez de CiU y los 147 del PP, siempre que acudan todos los diputados de esos grupos.
El PP ha movilizado a los suyos y estará hasta Mariano Rajoy, aunque les faltarán por motivos médicos Rogelio Baón, María Salom y José Oreiro.
Apoyo tránsfuga
Para rechazar la reprobación el PSOE tiene sus 164 y, con toda seguridad, otros dos que le han caído del cielo últimamente y que apoyan al Gobierno de manera aparentemente incondicional: los tránsfugas Román Rodríguez y Joaquín Calomarde. Este último procede del PP, pero posee un irrefrenable impulso para votar siempre en contra del Grupo Popular.
Para aumentar esa cifra, el portavoz del Grupo Socialista, Diego López Garrido, negociaba la noche del lunes a toda prisa con los otros siete del Grupo Mixto y, sobre todo, con los siete del PNV.
En principio, eran muy reticentes a salvar a la ministra Begoña Lasagabaster de EA, que llegó anoche de Kuwait; Uxue Barko de Nafarroa Bai y José Antonio Labordeta de la Chunta Aragonesista.
Los dos diputados de Coalición Canaria y los dos del BNG aseguraban el lunes que no aún no habían tomado una decisión. Los canarios, desde que pactaron con el PP en las islas, mantienen una posición contraria al Gobierno y, por eso, el Grupo Socialista consideraba más asequible el apoyo de los nacionalistas gallegos, con los que negociaba anoche.
Los siete diputados del PNV aseguraban anoche que tampoco tenían una decisión tomada, pero todo parece indicar que apoyarán al Gobierno para salvar a la ministra. Sin entusiasmo, porque ya en julio se abstuvieron en la Diputación Permanente en una votación sobre Magdalena Álvarez, pero en reciprocidad al acuerdo que en las últimas semanas les ha llevado a aprobar los Presupuestos y a que los socialistas apoyen las cuentas de Ibarretxe.
Con los escaños del PNV y sin que haya ausencias, el PSOE sumaría 171 votos, más dos de los tránsfugas y a la espera del BNG y Coalición Canaria.
En la reunión de la Permanente del PSOE, López Garrido garantizó ayer al resto de dirigentes del partido que el PNV votaría en contra de la reprobación.
Si se aprobara la moción no tendría más que un valor símbólico, pero sería un duro revés para el Gobierno.
La moción es de IU, que siempre ha votado en contra de los Presupuestos de la ministra de Fomento.
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