Sorprendidos, molestos, preocupados, indiferentes... Los miembros del PSOE reaccionaron ayer de manera desigual al comentario que hizo el presidente José Luis Rodríguez Zapatero durante la tradicional copa navideña, cuando desveló que ya ha había aclarado su futuro político y se lo había comunicado a una persona del partido.

Firme defensor de que 'en política, administrar los tiempos es un valor', como ha repetido Zapatero en varias ocasiones, esta declaración ha desconcertado a más de uno dentro y fuera del partido. Entre ellos, el ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco. 'Honestamente, me ha sorprendido', señaló ayer en una entrevista en RNE. También recordó que 'Zapatero es el mejor activo del PSOE' y que cuenta con su apoyo para que vuelva a ser candidato.

Varios miembros de la dirección socialista están convencidos de que el presidente desvelará la incógnita sobre su futuro en fechas próximas. 'Ha sido él mismo quien ha puesto el tema en el centro del debate y no tendría sentido mantener durante meses la duda sobre un tema tan importante', explican. En todo caso, descartan que vaya a esperar a las elecciones autonómicas y locales del 22 de mayo. 'Él jamás ha dicho que vaya a esperar a conocer el resultado electoral', destaca otro miembro de la cúpula del PSOE.

Otros dirigentes consultados por este diario prefirieron restar importancia a las palabras del líder por el contexto en el que fueron pronunciadas, en un 'ambiente distendido y con periodistas'. Algunos, incluso, insinuaron que era una estrategia 'para desviar el foco de atención de Rubalcaba', que últimamente ha sido ensalzado como presidente in pectore. Por último, no falta quien hace la lectura de que Zapatero 'está preparando el terreno porque no va a repetir como candidato'.

No obstante, la mayoría cerró filas en torno al líder. 'No hay un debate sucesorio real', insistía un miembro de la Ejecutiva Federal. En este sentido, el portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, se mostró convencido de que Zapatero 'seguirá siendo el candidato'.

El vicepresidente tercero del Gobierno y presidente del PSOE, Manuel Chaves, evitó alimentar 'especulaciones' sobre el futuro político del líder y zanjó el asunto subrayando que Zapatero es quien tiene que decidir cuándo y cómo comunicar sus decisiones. Algunos barones socialistas evitaron pronunciarse públicamente sobre la posible sucesión de Zapatero. 'Prefiero no opinar', señaló el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda. Por la tangente se escabulló el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara: 'Está lloviendo bastante'.