El Rey se encargó este martes personalmente de poner en la pista a los periodistas de la primicia informativa que escondía su mensaje contrario a las 'disensiones' y la persecución de 'quimeras', relacionado con la actual situación en Catalunya.

Durante el cóctel en el salón de pasos perdidos del Tribunal Supremo, con motivo del acto de apertura del año judicial que acaba de presidir, el monarca se acercó a charlar de modo informal con dos periodistas.

Uno de los informadores le preguntó si había visto esta semana en televisión un reportaje sobre el Toisón de Oro. Don Juan Carlos contestó que no, aunque intentaría hacerlo porque el tema le parecía interesante.

A continuación, y sobre el abandono de Esperanza Aguirre de la política, explicó que le deseaba lo mejor porque la tenía mucho aprecio. Luego, le preguntaron por su estado de salud. 'Muy bien', contestó, aunque añadió que los periodistas se creen que 'los políticos son eternos, y no lo son, ni yo tampoco'.

Al final de la conversación, se le preguntó por Catalunya. Y el Rey respondió: 'No quiero hablar de cosas de presidentes, porque cuando hablo de cosas de presidentes siempre se lía'.

Pero a renglón seguido, remitió a los periodistas --sería la una y cuarto de la tarde de este martes-- a una carta suya que iba a publicar a las dos de la tarde la nueva página web de la Casa Real, estrenada hace unos días. Finalmente, la misiva fue publicada un poco antes de la hora anunciada por el monarca en la citada página digital. 

Una vez que fue difundida, la carta eclipsó en importancia informativa los discursos del fiscal general del Estado y del presidente del Tribunal Supremo pronunciados inmediatamente antes del cóctel, sobre la situación de la justicia en España y la evolución de la criminalidad.