Los últimos grandes robos de explosivos perpetrados por ETA se produjeron antes del inicio del alto el fuego permanente que dio comienzo el 24 de marzo de 2006 y que la banda dio por finalizado el pasado 6 de junio. Desde abril de 2005 la banda ha cometido seis atracos a mano armada robando explosivos, pistolas o matrículas en Francia.

A finales de abril de 2005, un grupo de encapuchados armados robaron cuatro toneladas de clorato sódico del almacén de una empresa química del oeste de Francia en la localidad de Saint Benoit, al oeste del país. En octubre de ese año, la banda terrorista se hizo con materiales químicos y equipos para fabricar documentos falsos de identidad.    

El 22 de diciembre de 2005, sustrajo en Normandía casi 1.300 kilos de polvo de aluminio tras asaltar la empresa Radium Bronze. Esta sustancia es la base para fabricar amonal y amosal, dos explosivos de gran poder de destrucción.

30.000 matrículas

El 15 de marzo de 2006, apenas unos días antes de declarar el alto el fuego permanente, la organización armada sustrajo 30.000 matrículas de coche y máquinas para troquelarlas.    

El 23 de octubre de ese mismo año, en pleno alto el fuego, los terroristas sustrajeron en la localidad francesa de Vauvert 350 pistolas y gran cantidad de munición.

A finales de junio de este año, con el alto el fuego permanente roto por la banda, los terroristas robaron a punta de pistola más de 40 kilos de pastillas para encender fuego en una tienda del noroeste de Francia, en la localidad de Bischoffsheim.