Público
Público

Rubalcaba cree que ha logrado recortar la distancia con el PP

El candidato reivindica abiertamente, por primera vez, la actuación de Zapatero 'en medio de la tormenta'

GONZALO LÓPEZ ALBA

Y con ustedes... 'la persona que ganó el debate'. Así fue presentado ayer Alfredo Pérez Rubalcaba en su primer acto público tras el cara a cara televisivo con Mariano Rajoy, un encuentro en Talavera de la Reina organizado por las Juventudes Socialistas.

El PSOE cree que Alfredo Pérez Rubalcaba logró situar el lunes la campaña donde más le convenía. Por una parte, porque imprimió un cambio de ritmo que, a 12 días para las elecciones, abre la esperanza de que ahora pueda explotar sus acreditadas condiciones de esprínter. Por otra parte, porque logró acrecentar los temores ante las inconcreciones de Rajoy sobre su voluntad de mantener el Estado de bienestar y algunos derechos y libertades cuyos beneficiarios directos pueden encontrar un acicate para salir de la abstención 'indiferente'. Y, finalmente, porque entre sus propuestas y los silencios del candidato del PP a su interrogatorio fijó la foto nítida de una alternativa entre el ajuste a palo seco o un ajuste 'con vitaminas' públicas al crecimiento para generar empleo.

El PSOE alerta contra la concentración de poder por parte del PP

El propio candidato, durante una conversación informal con los periodistas que siguen su campaña, expresó su creencia de que, a pesar de que todos los sondeos han dado como ganador a Rajoy, ha logrado acortar la distancia que le separaba de su antagonista. Con independencia del voto que pueda movilizar, el debate supuso un revulsivo anímico para Rubalcaba y sus seguidores. En su opinión, marcó un punto de inflexión en la campaña.

'A mí, esto de ganar o perder... No digo que me dé lo mismo, pero lo más importante era transmitir razones', sostuvo. Y, a su juicio, ahora 'hay millones de españoles que saben que tenemos una causa, que tenemos razones para pedir su voto. Saben que si dan su confianza al PSOE saldremos de la crisis con los poderes públicos tirando de la economía, con protección social para todos y sin dejar atrás a nadie'.

La síntesis la hizo la claque colocada en la grada del escenario, que coreó: 'Con Rubalcaba, un pasito p'alante; y con Rajoy, un pasito p'atrás'.

Si en el debate televisivo no hubo sorpresa, sí la hubo, aunque precocinada, en el mitin que por la tarde celebró en Toledo. 'Pide la palabra Pepe Bono...' Y la tomó durante diez minutos para subrayar que la cita del 20-N es 'la más difícil' a la que se ha enfrentado el PSOE; 'no el 93, ni el 96, ni el 2004'. Ante ese desafío, lanzó una consigna para alentar a los suyos: 'No nos arrugamos, queremos ganar. Si queremos, podemos'. Casi como quien eleva una plegaria, el expresidente de Castilla-La Mancha agregó: 'Alfredo se lo merece y España lo necesita'.

Bono, que no es candidato en estas elecciones, expresó su 'orgullo' porque sea Rubalcaba 'nuestro líder y nuestro candidato'. 'Gracias, Alfredo, por tu valor y por mojarte. Tú vas con la cara descubierta y no con la pillería del estudiante repetidor', dijo en su glosa del candidato. Y afirmó que el PP siempre ha utilizado 'mañas' para ganar, con evocación expresa de 'cuando, en el 93, querían meter en la cárcel a Felipe González'.

No sólo hizo Bono el panegírico de Rubalcaba, sino que suyas fueron también las palabras que dieron pie a la primera reivindicación que el candidato hace abiertamente de José Luis Rodríguez Zapatero desde que hace seis días comenzó la campaña. Bono pidió el voto en apoyo de Ru-balcaba, pero también en desagravio 'al más denostado e injustamente peor tratado' entre 'los grandes hombres del socialismo'.

Bono habla fuera de programa y pide 'no arrugarse' ante la cita

Rubalcaba, que antes de llegar al mitin había hablado ayer en dos ocasiones con el presidente del Gobierno, cogió el hilo y dijo comparecer a las elecciones 'con la tranquilidad de haber pertenecido a un Gobierno, el de Rodríguez Zapatero, que ha mantenido nuestros principios en medio de la tormenta'. Es decir, que a pesar de la crisis ha preservado las prestaciones sociales, especialmente la ayuda a los parados.

En la capital de Castilla-La Mancha, que los socialistas consideran el laboratorio de ensayo de Rajoy con María Dolores de Cospedal de presidenta, Rubalcaba subrayó que el PP está intentando 'destruir la obra' de los socialistas. Lo corroboró el expresidente José María Barreda, quien puso voz a la alarma de que con un PP que trata al 'adversario como enemigo no conviene que acumule más poder del que ya tiene'. El candidato también abonó ese sentimiento de temor: 'Esta derecha no habla, pero actúa'.

Y, como colofón, el mensaje que Rubalcaba machacará hasta el último día: 'Sólo perderemos si desistimos'.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias