Público
Público

"En la selectividad los nervios siempre te pueden traicionar"

30.000 alumnos de Madrid y La Rioja se examinaron ayer para acceder a la universidad

PAULA DÍAZ

Los apuntes revueltos, las uñas mordidas, los tirabuzones en el pelo, los olvidos del DNI y los bolígrafos perdidos denotaban ayer el ambiente de nerviosismo en el campus de la Universidad Complutense de Madrid, donde más de 10.000 alumnos iniciaron las pruebas de acceso a la universidad. En toda la Comunidad de Madrid más de 28.000 estudiantes de Bachillerato se presentaron a estos últimos y decisivos exámenes de su vida escolar y en La Rioja, donde también se celebraba la prueba, otros 1.086 jóvenes vivían una situación parecida.

e_SDLqHe venido una hora antes porque tenía miedo de llegar tarde', confesaba ayer entre risas Beatriz Matamaestre, de 17 años. 'Llevo toda la mañana nerviosa y al final no es tan complicado, porque las preguntas te las han repetido mucho en el colegio', añadió.

Lo mismo opinan muchos de sus compañeros, que incluso afirman que es más difícil el último curso de Bachillerato que la tan temida selectividad. 'Si estudias no es difícil y en el instituto te preparan muy bien', afirmó David Navarro, de 19 años. 'Lo peor son los nervios, pero en cuanto lees las preguntas del examen ya se te pasa', apuntó Rocío Cabrera, de 18 años.

Pero pese comprobar que 'no es para tanto', 'jugárselo todo en unos exámenes finales' no les parece justo. 'Los nervios siempre te pueden traicionar y un examen puede borrar todo el trabajo de un curso', lamentó Javier Carmona, también de 18 años.

Juan José Echenagusía, profesor del colegio Santamaría de los Rosales, de Aravaca (Madrid), también comparte esta opinión: 'Tiene que haber una prueba que elabore el ranking de distribución de plazas, pero esto no mide la capacidad de los alumnos'.

Todos los entrevistados ayer confiaban en aprobar, aunque su temor era no conseguir nota suficiente para acceder a la carrera que les gustaría cursar. Para conseguirlo, la mayoría se presentará al examen específico que, desde el curso pasado, se puede realizar de forma voluntaria para subir nota.

'Me hace mucha ilusión empezar la universidad; sólo espero entrar en Periodismo', apuntó Beatriz. INEF, Psicología, y Telemática eran otras de las opciones elegidas. Y, como aseguran estos estudiantes, no han decidido su futuro en función de las salidas profesionales de cada carrera, sino por vocación. 'Yo estudiaré Educación Infantil porque me encantan los niños', sentenció Yolanda del Amo, de 17 años.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias