Alarma en Acapulco tras sumar 24 asesinatos este fin de semana

Nueve personas murieron este domingo en un tiroteo en la entrada de la localidad turística de Acapulco (sur de México), en pleno puente vacacional, informó la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Guerrero.

En total,  el municipio de Acapulco ha registrado este fin de semana 24 de los al menos 35 asesinatos ocurridos en el estado de Guerrero, que las autoridades atribuyen al enfrentamiento de carteles de la droga rivales por el control del territorio.

Las autoridades han reforzado la presencia de fuerzas policiales y del Ejército para garantizar la seguridad de la población y de las decenas de miles de turistas que la visitan este puente vacacional, que se extiende hasta mañana. La ocupación hotelera está al 75%.

El último suceso tuvo lugar sobre las 06,00 horas (12,00 GMT) junto a un hospital público cerca del túnel que hay en la entrada del enclave.

Al lugar se desplazaron efectivos de la seguridad federal, estatal y municipal, que localizaron los cadáveres de las nueve personas, asesinadas con arma de fuego.

Cuatro de ellos estaban tirados en la calle y otros cuatro en el interior de dos vehículos

Cuatro de ellos estaban tirados en la calle y otros cuatro en el interior de dos vehículos. El último corresponde a una joven de 23 años que circulaba por la zona en un taxi y fue alcanzada por una bala en la cabeza.

En el escenario del tiroteo había nueve vehículos abandonados, ocho camionetas y un coche, todos de lujo.

Además, seis policías municipales fueron acribillados ayer en dos puntos de la municipalidad de Acapulco, donde también se hallaron dispersos otros nueve cadáveres.

Cuatro de ellos habían sido decapitados, una práctica habitual del narcotráfico.

Asimismo, al noroeste del municipio, en la localidad de Ajuchitlán del Progreso, se registró un choque entre soldados y presuntos sicarios, que se saldó con diez pistoleros y un militar muertos.

El estado de Guerrero, disputado por varios carteles de la droga, se ha convertido en uno de los territorios de México más atacados por la violencia, consecuencia de la pugna entre grupos criminales, que ha dejado más de 17.000 muertos en tres años en todo el país.