Las autoridades alemanas podrán vigilar domicilios privados con cámaras ocultas en la lucha antiterrorista, según prevé un borrador de la ley de reforma de la Oficina de Investigación Criminal que difundieron ayer varias agencias de noticias.

No sólo será posible filmar las viviendas de los sospechosos, sino también cualquier domicilio de terceras personas del que un supuesto terrorista entre y salga con frecuencia.El ministro del Interior, el democristiano Wolfgang Schäuble, llegó el martes pasado a un acuerdo con su colega de Justicia, la socialdemócrata Brigitte Zypries, para sacar adelante esa ley.

Hasta ayer no se había confirmado el detalle de las cámaras ocultas. El proyecto de ley había causado gran controversia por la autorización de espionaje de los ordenadores personales de sospechosos a través de virus del tipo 'troyano'.

Después de un dictamen del Tribunal Constitucional, los artífices de la ley tuvieron que renunciar a la posibilidad de permitir a los agentes entrar en las viviendas de sospechosos para instalar el software necesario para espiar los discos duros, por lo que el programa espía sólo podrá llegar a través de un mensaje de correo electrónico.

En el caso de la instalación de cámaras, el portavoz de Schäube, Stefan Paris, precisó que sólo será posible cuando haya una 'grave sospecha' de actividades terroristas.Pese al acuerdo, en las filas socialdemócratas algunos diputados siguen considerando problemática la medida.

La jefa del grupo parlamentario verde, Renate Künast, criticó que el ministro Schäuble 'quiere construir una especie de Estado de seguridad preventiva en el que cualquier persona es un delincuente potencial'.
Petra Pau, diputada del partido Die Linke (La Izquierda), señaló que la ley 'afectará a personas que conozcan a otras personas que al mismo tiempo conocen a otras personas, es decir, al final, a todo el mundo'.