Dos años después de Snowden, los gobiernos persisten en vigilarnos
Los programas de vigilancia masiva y control de las comunicaciones se extienden por todo el mundo a pesar de que han sido condenados como una violación de los derechos humanos por tribunales, parlamentos y asociaciones sociales
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MADRID.- Los gobiernos mantienen e intentan ampliar la vigilancia masiva sobre las comunicaciones de sus ciudadanos, según han denunciado Amnistía Internacional y Privacy International en un informe conjunto cuando se cumplen dos años desde las revelaciones del exagente de la CIA Edward Snowden.
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"Gracias a Edward Snowden, millones de personas ordinarias son conscientes de que ni siquiera sus secretos más íntimos están a salvo de la intromisión del gobierno"
"Gracias a Edward Snowden, millones de personas ordinarias son conscientes de que ni siquiera sus secretos más íntimos están a salvo de la intromisión del gobierno", ha declarado la directora legal de Privacy Internacional, Carly Nyst, quien ha recordado que la vigilancia masiva ha sido condenada deforma rotunda por organismos nacionales e internacionales expertos en derechos humanos.
LOS GOBIERNOS DESAFÍAN LA OPINIÓN PÚBLICA
En los últimos dos años, como han explicado en el comunicado, la vigilancia masiva ha sido condenada como un exceso y una violación de los derechos humanos por tribunales, investigaciones parlamentarias y expertos jurídicos y tecnológicos designados por gobiernos e instituciones internacionales como el Consejo de Europa y las Naciones Unidas.
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Dinamarca, Finlandia, Francia, los Países Bajos, Pakistán y Suiza debaten o promulgan nuevas leyes de que incrementarán su capacidad para espiar las comunicaciones
El informe advierte que, desafiando la condena global, los programas de espionaje de Reino Unido y Estados Unidos permanecen cubiertos en secreto, mientras que otros tantos gobiernos buscan nuevos poderes de vigilancia por su cuenta.
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"Las compañías tecnológicas deben hacer mucho más por proteger la privacidad de sus usuarios y la libertad de expresión online"
Los grupos de derechos han hecho, además, un llamamiento sobre las compañías de Internet y de Telecomunicaciones más importantes para que hagan más por proteger las comunicaciones a través Internet y por teléfono de miles de millones de personas de la vigilancia invasiva y los ataques criminales.