Este artículo se publicó hace 17 años.
Aprueban la nueva constitución de Bolivia en medio de disturbios
Un abogado de 29 años murió anoche y hay al menos 70 heridos, uno de ellos en estado crítico.
La mayoría oficialista de la Asamblea Constituyente boliviana ha aprobado hoy, en un cuartel militar y en ausencia de la oposición, el proyecto de nueva Carta Magna del presidente Evo Morales.
La votación ha estado marcada por los disturbios que desde hace 48 horas han tenido lugar a las puertas del edificio. En ellos, el abogado Gonzalo Durán, de 29 años, murió anoche por disparo de bala en los enfrentamientos entre policías y universitarios en las calles de Sucre, capital oficial de Bolivia (aunque el Gobierno y el Parlamento están en La Paz) , mientras que al menos 100 personas resultaron heridas de gravedad.
Según el médico Armando Mur, del hospital Santa Bárbara de Sucre, una de estas personas "está en coma profundo y se debate entre la vida y la muerte".
Los sucrenses y la oposición califican de ilegal la reunión oficialista por celebrarse en un cuartel militar, por violar supuestamente el reglamento y por la agenda programada, que no incluyó la reclamación de Sucre de ser sede de todos los poderes estatales, motivo principal de los incidentes.
En el primer debate la Constitución recibió el respaldo suficiente para salir aprobada en bloque, aunque ahora será sometida a votación artículo por artículo. El texto impulsado por el presidente Morales obtuvo 136 sufragios de los 138 constituyentes presentes. Faltaba la oposición. Tras la lectura del índice de la nueva Carta Magna, sin detallar el texto, la mayoría oficialista ha votado a mano alzada y no ha habido comprobación de los votos.
El ex presidente Jorge Quiroga, líder de la mayor alianza de oposición de derecha, ha acusado a Morales de "degollar" la democracia boliviana con ayuda y dinero de su amigo, aliado y colega venezolano, Hugo Chávez. El jefe de Poder Democrático y Social (Podemos) ha afirmado que Bolivia "no va a aceptar una nueva Constitución a punta de fusiles y bayonetas".
El gobernador regional, David Sánchez, afín a Morales pero en las últimas semanas distanciado del Gobierno, entró al cuartel tras la muerte del joven abogado para pedir a los constituyentes que suspendieran sus deliberaciones y evitaran así más muertos.Su solicitud fue rechazada.
Minutos después, la mayoría oficialista aprobaba, sin debatirlo, el texto de la nueva Constitución, con la que Morales promete "refundar Bolivia", una afirmación calcada al discurso de Hugo Chávez. Previamente, había reformado el reglamento de debates de la Asamblea, que preveía la aprobación de todas las decisiones por dos tercios.
A continuación, los asambleístas recluidos desde el viernes en un liceo militar resguardado por policías, militares y partidarios del Gobierno, entonaron el himno nacional y la sesión quedó cerrada.
Al foro apenas le quedan tres semanas para entregar la nueva Constición, ya que el próximo 14 de diciembre vence la prórroga que tuvo que darse en agosto pasado, tras un año sin aprobar ni un solo artículo del texto
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