El Ministerio de Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) instó a EE.UU. a contribuir a "detener el proyecto colonial" sobre territorio palestino ocupado que considera que encarna el primer ministro israelí, Naftali Benet, que hoy debe reunirse con el presidente Joe Biden en Washington. Según aseguró la ANP, el Gobierno de Biden tiene ahora "la oportunidad de detener el proyecto colonial" de Benet, quién justamente realiza su primera visita oficial en Estados Unidos tras asumir en junio la jefatura del Gobierno de Israel con una amplia coalición.

El jefe de Ejecutivo israelí comenzó ayer sus encuentros con altos cargos estadounidenses en Washington. Entre otros, se reunió con el secretario de Estado, Antony Blinken, con quién trató asuntos de seguridad regional, incluido Irán o el conflicto palestino-israelí. Blinken destacó en la reunión que tanto israelíes como palestinos merecen por igual libertad, prosperidad y dignidad, algo necesario para la solución de dos Estados que defienden los demócratas.

La ANP valoró positivamente este punto de vista, que "expresa las posiciones humanitarias" y "las orientaciones actuales del Gobierno de Biden", pero se pregunta como reaccionó Benet a esta postura. El dirigente israelí presenta ahora visiones más pragmáticas al integrar una coalición de amplio espectro ideológico, pero es líder de una corriente derechista y ultranacionalista favorable a la colonización judía y contraria a la creación de un Estado palestino. De hecho, en una entrevista con el diario The New York Times antes de viajar a Washington, Benet dijo que seguirá con la expansión de colonias israelíes en territorio palestino y que descarta abordar un proceso de paz con los palestinos mientras él siga en el Gobierno. En estas posturas difiere con la actual Administración demócrata, reacia a expandir los asentamientos y partidaria de dos Estados.

Ante ello, la ANP afirma que en este contexto "hay una ventana de oportunidad para que Biden y Blinken" presionen a Benet, y a su vez, se pregunta si realmente "existe una visión estadounidense que obligue a Benet a detener su proyecto colonial contra la paz". El liderazgo palestino reclama un Estado propio con capital en Jerusalén Este que incluya Cisjordania ocupada y la Franja de Gaza. Sin embargo, la ANP solo tiene un autogobierno limitado en áreas reducidas de Cisjordania y no ejerce ningún control sobre la parte oriental de Jerusalén, anexionada bajo jurisdicción israelí.