China niega las acusaciones de espionaje de EEUU

"Pedimos que Estados Unidos abandone su mentalidad de guerra fría y cese su crítica gratuita a China", declaró ayer el portavoz chino del Ministerio de Exteriores Liu Jianchao al negar las últimas acusaciones de espionaje de Washington.

Liu advirtió que la actitud de la Casa Blanca "no ayuda a las relaciones bilaterales".

El FBI ordenó el lunes el arresto de cuatro personas sospechosas de espiar para China. Tres de ellas, Greg William Bergersen, Tai Shen Kuo y Yu Xin Kang, son acusadas de facilitar información sobre ventas de material militar estadounidenses a Taiwán.

En un caso aparte, el ex ingeniero de Boeing Dongfang Chung presuntamente robó secretos industriales para Pekín durante su trabajo en la compañía.

A finales de 2007, Alemania y Gran Bretaña imputaron a las autoridades chinas por ciberespionaje en empresas y organismos oficiales.

El FBI cuenta con una oficina de operaciones en Pekín desde 2002. Varios analistas estadounidenses han señalado que el estilo de espionaje chino es difícil de detectar y contraatacar porque emplea una red vasta y descentralizada de científicos chinos, estudiantes y hombres de negocios.

"Las actividades de espionaje chinas son la mayor amenaza a la tecnología estadounidense y ponen a prueba el sistema de contrainteligencia", dijo el 29 de enero ante el Congreso Larry Wortzel, presidente de la comisión chinoestadounidense para la seguridad y la economía.