El dirigente de la ultraderecha austriaca Joerg Haider circulaba a 142 kilómetros por hora cuando sufrió el accidente que le costó la vida ayer , el doble de la velocidad permitida, 70 km/h, según la BBC. Los golpes que sufrió su Volkswagen Phaeton V6l le produjeron al líder de la Alianza para el Futuro de Austria (BZO) lesiones de importancia en la cabeza, el cuello y el pecho. Su columna vertebral quedó rota y su mano izquierda quedó casi amputada.

Según varios testigos, Haider estuvo en dos fiestas (Un acto oficial y la presentación de una revista) antes del accidente, cuando se dirigía a visitar a su madre, de 90 años de edad, en el día de su cumpleaños. Según los testigos, estaba visiblemente cansado, pero había dado la noche libre a su chófer, por lo que condujo él mismo su vehículo oficial.  'Joerg conducía a menudo. Me dio muchos días libres. Ahora lamento profundamente haber aceptado', dijo su conductor Friedrich Schager.

El accidente que terminó con la vida del gobernador de la región de Carintia tuvo una morbosa curiosidad. Haider 'odiaba' la carretera en la que murió, ya que sufrió un accidente similar en 1993 del que salió ileso.

La muerte de Haider podría suponer un impulso a las iniciativas para la fusión de la BZO y la formación de la que se escindió, también de extrema derecha, el Partido de la Libertad de Austria (FPO), ahora dirigido por Heinz-Christian Strache. 'Es posible que la marcha temprana de Haider permita una colaboración mucho más cercana entre los dos partidos. Después de todo, sus diferencias nunca fueron políticas, sino de naturaleza personal, propiciadas por el rencor entre ambos dirigentes', explicó el profesor universiario Peter Filzmaier, uno de los politólogos más prominentes de Austria.