El caricaturista danés amenazado de muerte por sus dibujos de Mahoma, Kurt Westergaard, se ha quedado sin techo, al menos de momento. Tras haber abandonado primero su casa por razones de seguridad, el dibujante deberá dejar también el hotel donde se había refugiado, dijo hoy el propio Westergaard a la radio pública DR.

La dirección del hotel le pidió que tanto él como su esposa, de 73 y 65 años, respectivamente, dejen el establecimiento por considerar su presencia un “factor de riesgo”, indicó Westergaard. Desde hace tres años, cuando el diario Jyllands-Posten publicó la famosa caricatura del profeta Mahoma ataviado con un turbante que emulaba a una bomba con mecha incluida, está amenazado de muerte.

El pasado noviembre, los servicios secretos daneses le aconsejaron que dejara su casa, por lo que desde entonces se alojaba en un hotel. Pero el paso del tiempo no parece haber calmado los ánimos de muchos musulmanes que se sintieron ofendidos por estos dibujos.

La semana pasada la policía danesa detuvo a tres hombres, dos tunecinos y un danés de origen marroquí, sospechosos de preparar un atentado contra Westergaard. A raíz de ello, los principales diarios del país volvieron a publicar la polémica caricatura del profeta, por considerar el complot como un atentado contra la libertad de expresión.

El Jyllands-Posten publicó en septiembre de 2005 una docena de caricaturas de Mahoma, que inicialmente pasaron inadvertidas, pero que meses después provocaron una ola de violencia en varios países musulmanes.

En las manifestaciones de protesta que se celebraron en el mundo islámico, hubo más de un centenar de víctimas mortales. Los disturbios volvieron a Dinamarca la semana pasada. Grupos de musulmanes mostraron de nuevo su indignación por estas caricaturas que estiman ofensivas.