Y Lula llegó. El discurso del expresidente brasileño era el momento más esperado de la segunda jornada del Foro Social Mundial de Dakar, ya que se trataba de su primera aparición internacional desde que dejó el poder. Acompañadopor los aplausos de sus seguidores, Luiz Inácio Lula da Silva presentó un programa para el desarrollo económico de África y puso el auge de Brasil como ejemplo.

'Los problemas de África tienen que ser tratados en los foros africanos', dijo el brasileño. 'Hay que recuperar las tradiciones revolucionarias y humanistas nacidas de las independencias africanas', apuntó. Lula declaró también que 'el orden económico mundial ya no será igual', porque 'sin los países en desarrollo no será posible un nuevo ciclo mundial de crecimiento'.

El expresidente llamó a los países africanos a buscar su independencia en materia alimentaria y a 'cortar la dependencia de las antiguas potencias coloniales'. Los animó a realizar una verdadera 'revolución agrícola' y presentó nuevamente Brasil como ejemplo. Criticó también la actitud de los países occidentales por subvencionar a sus agricultores, perjudicando así a los campesinos africanos, y pidió un cambio 'en los patrones de cooperación internacional'.

Lula apeló a los países desarrollados a 'asumir un compromiso con África' en un contexto de aumento del precio de los alimentos. 'Ya es hora de poner el desarrollo y la democracia en el centro de la agenda africana e internacional', apuntó.

El exmandatario abogó por una redistribución de la riqueza y por una mayor justicia social, 'la manera más sostenible de desarrollarse'. 'El consenso de Washington está muerto', opinó. Dos años después de ser abucheado en el Foro Social celebrado en la localidad brasileña de Belem por su política considerada 'social-liberal', Lula arrancó en su visita de 24 horas muchos aplausos.